1.2 - No me dejes

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Hoy era la cena. Ya solo faltaban tres meses para su patética boda. 

Miré una última vez el estúpido vestido que me habían elegido para hoy antes de ponerme mi vestido, obviamente el que mi mamá y Jason no querrían que use. Dejaba ver demasiado mi escote pero era mi mejor forma de hacerles saber que yo tomaba mis propias decisiones.

Le mandé un mensaje a Nate después de terminar de arreglarme.

"-seguro no podes venir? :(

-si llego a ir les puede agarrar un paro :( ya nos vamos a ver bebé

-eso espero. Esta cena va a ser un fracaso😈

-mi pequeño diablito. Portate bien. No voy a estar pero sí te voy a ver👀

-de alguna forma siempre estás en todos lados. Después hablamos, ya empezaron a llegar los invitados😘"

Escuché los gritos de mi abuelo y automáticamente sonreí. En mi familia nadie quería a Jason, solo lo aceptaban (bueno, cuando mi mamá escuchaba únicamente). Al fin había gente bajo mi mismo techo que entendiera mi disgusto por él, aparte de Ethan claro.

Bajé y ahí estaban mis abuelos, mis tíos y unos primos. Además de los amigos de la familia, Chris y Bea.

-¡Mi princesita! ¡Que grande estás! -gritó mi abuela delante de todos, haciéndome sonrojar. Corrí hacia mis abuelos y los abracé.

-Cuidado con el ciático nena, ya no somos jóvenes -dijo Ed, mi abuelo. Reí ante su comentario.

-Los extrañé. Demasiado.

-Y nosotros a vos -me pellizcaron las mejillas como solo los abuelos saben-. ¿Cómo estás?

-Como puedo en la casa de los locos Adams -me encogí de hombros.

-Ese es mi soldadito -mi abuelo siempre decía que yo era quién llevaba los pantalones en la familia-. Ya vengo, voy a buscar a mi segundo soldadito.

-Me muero por ver cómo está tu hermano -dijo mi abuela siguiéndolo-. Ya me vas a contar detalle por detalle sobre todo muchachita.

Jillian, mi abuela, siempre fue como una amiga cuando fui chica. Me ayudó a sobrellevar varias cosas que mamá no podía. Me entendía incluso más que Bea.

Hablando de Bea, ¿dónde se había metido esta chica?

-

El resto de la cena fue tan aburrido como uno se puede imaginar. Apenas me crucé con mi mamá y, para colmo, Chris se la pasó hablando con Jason y sus amigos. Si no hubiera invitado a Bea probablemente estaría hablando con las plantas como una loca ahora mismo.

-Repetime por qué el bombón de tu novio no vino -dijo Bea por quinta vez.

-No les cae bien a estos -señalé a mi mamá y a Jason, que hablaban muy animadamente con todos-. Y por quinta vez, ¡No es mi novio!

-Pero te gustaría. Y lo tendrías que haber invitado de todas formas, debe haber unas 150 personas acá. No lo habrían visto ni aunque entrara en caballo.

-Hay unos 5 tipos de seguridad afuera, y está el otro con la lista de invitados. Además alguna vez tengo que hacer el papel de buena hija y obedecer.

-Esa es mi buena chica -me revolvió un poco el peinado y rió.

Estábamos sentadas en la mesa, pero la verdad era que nadie se daba cuenta que en realidad estábamos ahí. 

-Vámonos -le dije a Bea.

Nos sentamos en las escaleras de afuera junto con Ethan, que la estaba pasando tan mal como nosotras.

Bad // Nate MaloleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora