No somos perfectos, lo siento. // Sebastián Villalobos // (+18)

Capítulo 12: << ¿Daniel? >>

Me baje de una de las caderas de Héctor y me senté en la silla.

-¿Qué pasa Villalobos?

-Qué mando a decir Dora, la profesora de algebra que si ya puede mandar a esta para la clase.

-Esta tiene nombre imbécil. –Dije-

-Dile que en 15minutos se va. –Dijo y mire mi reloj, en 15 minutos tocaba el cambió de clase, y sonreí por lo bajo-

-¿por qué no la manda ahora? –Dijo-

-Dije que en 15 minutos la mando.

-Pero ella no está... -Lo interrumpí-

-Héctor, sabes que luego hacemos la revancha. –Dije y tome mi mochila-

Salí de la oficina de Héctor y me fui al salón de algebra, llegue y la profesora no estaba, me senté en un puesto libre y por cosas de la vida David estaba con unas chicas en la silla donde yo estaba hace un rato, al momento llego Sebastián y se sentó a mi lado, ambos no dijimos nada hasta que se acabó la clase, luego tome mi mochila de nuevo, y fui a una máquina de despensa, saque una gaseosa y unas frituritas, las destape y me las fui comiendo hasta el salón de literatura, llegue y me senté puse mis pies al frente de la mesa saque mis audífonos y los conecte, me los puse y seguí comiendo mis frituras.

-¡LINDA! –Grito alguien-

Me quite los audífonos y seguí comiendo, desvié mi mirada hacia arriba y ahí estaba ese mismo chico de hace unas horas.

-¿Daniel?

-Te estaba hablando desde hace rato y nada que prestabas atención.

-Lo siento es que estaba escuchando música.

-Sí, eso note.

-¿Y... preparada para dos horas de literatura?

-Pues, supongo.

-¡DANIEL! –Gritó Sebastián-

-¿qué pasa Villawolf?

-¿qué haces con esa?

-¿Con Linda?

-Sí.

-Pues hablo con ella, no vez –Dijo Paisa- Oye Linda ¿puedo sentarme aquí contigo?

-Claro que sí.

(...)

Las clases terminaron, salí en busca de David, y no lo encontré me fui al parqueadero y lo espere por unos 15 minutos, luego lo vi y entro al auto.

-¿qué tienes David?

-¿qué tengo de qué?

-Te pasa algo dime.

-Mira Linda, no quiero hablar ahora, solo vamos a casa, ¿quieres?

-Agh, está bien

Conduje hasta la casa y entre sin decirle nada a David, me encerré en mi cuarto y mande a volar mi mochila, me tire a la cama, y cerré los ojos.

(...)

-Linda... Lin... Linda... ¡LINDA! -Escuche gritar a David-

-¿Qué?

-¿podemos hablar?

-Haber

-Perdón, sí perdón por estar así hoy contigo, sabes que los cambios no me gustan, y bueno pues me ponen así, ¿me disculpas?

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