Mi Ángel del Infierno.

INTERLUDIO VII "La vida eterna: Tras la horca y la muerte"

Narrador:
Madrugada Lunes 09 de Febrero del 2015.
Los habitantes del pueblo habían sido manipulados por Danion, había capturado a Hilda y a Jessica, habían matado a La Recepsionista del Hotel, estas mujeres servían a El Príncipe en sus múltiples homicidios, en fin, las capturaron, a La Recepcionista la "mataron" y a Hilda y a Jessica las colgaron de una horca, esa horca de la cual sus cuellos habían tronado cual huesos rompiendose, los habitantes del pueblo quedaron satisfechos con la muerte de estas tres mujeres, pero no había sido así, ellas no habían muerto...

Ellas ya habían muerto una vez hace varias décadas, El príncipe les había prometido la completa vida eterna, y así era, él acabó con la primer vida de estas, para convertirlas en sus fieles sirvientas, El Príncipe con su sangre las convirtió en inmortales, la sangre del Príncipe era una sangre muy poderosa, tenía el don de volver a alguien mortal en inmortal, incluso de regresar a alguien de la muerte para que permaneciera en este mundo por toda la eternidad, Alexander podía hacer eso, excepto con el mismo, él no sería inmortal con solo su sangre, si no con su astucia, la sangre le garantizaba la juventud eterna, su conserva y un periodo de vida más largó, pero nunca la vida eterna, esa ya dependería de su capacidad de supervivencia, ya que al igual que todos los vampiros cualquier cosa, cualquier descuido podría acabar con su vida...

Entonces fue así como estas mujeres "murieron" en la horca pero en realidad solo dormían por un pequeño lapso de tiempo, después sus cuerpos desaparecieron... y para que? Había prometido servir por toda la eternidad a Alexander, así lo harían, regresarían a buscarlo para también al igual que Juan, cuidar de él y más bien cuidar de ambos...