PARTE I
Juan:
Domingo 04 de Enero del 2015
Despertamos después de haber tenido una noche salvaje, nos quedamos en la cama todo el día, las sirvientas nos llevaron el desayuno y la comida, dormimos otra gran parte del día, entre horas también nos llevaban algo de beber, a mi solo agua, leche, café, o un simple vino, a él, sangre, sangre que guardaban, que le mandaban directo del Hotel, de las víctimas que llegaban ahí y que de vez en cuando la recepcionista también mataba, yo quería probar nuevamente la sangre, sólo la había probado una vez en la habitación del Hotel, me agradó mucho, estaba mezclada con alcohol, sabía realmente deliciosa, le pedí un trago y él no me lo negó, la volví a probar, exactamente ese mismo sabor pero con un concentrado más fuerte a sangre, me encantaba, le pedí más, y más, era extraño ya que yo era un simple mortal, pero ya tenía sed de beber un poco de líquido vital.-Amor! No quieres ser como yo?.- Me dijo derrepente.
-Como tu? Cómo?.- Le respondí.
-Un Vampiro, yo una vez te dije que me encantaría tener a un Vampiro como esposo, me encanta estar contigo y no me importa en lo absoluto que seas mortal, al contrario, Te amo sobre todas las cosas.- Me contesto.
-Amor! Sabes... cuando me encerraste en la habitación por meses, lo pensé muy bien, yo quiero pasar el resto de mi vida contigo, de una manera en la que ambos estemos cómodos, me encanta la manera en la que matas a las personas que se lo merecen, y a las que no también, me encanta tu rudeza y tu salvajismo, sobre todo, me encanta la sangre. Claro que quiero ser como tu, quiero convertirme en Vampiro y así estar juntos eternamente.- Le dije.
-Enserio amor? Me dejarías convertirte en un verdadero Vampiro?.- Respondió.
-Claro! Es lo que más anhelo.- Le conteste.
Saltó de la cama, "-Espera un momento" me dijo, llamo a las sirvientas y les ordeno traer todo para una conversión, tendría que hacerlo al caer la noche, y así sería, después de la media noche yo ya sería un Vampiro.
Las sirvientas acomodaron todo, nosotros seguimos acostados, él tenía una cara de felicidad igual a la de la noche anterior, yo le había mostrado como ser erótico estilo mortal, pero ahora el me enseñaría como ser erótico estilo Vampiro.
Cayo la noche, se dio una ducha, se vistió, sus trajes tan elegantes hacían que yo cayera rendido ante él, yo igual me vestí, me dijo que tenía que vestir todo de negro para darle más emoción a eso, basto con unos jeans negros y una playera del mismo color... Me sentía nervioso, no sabía si dolería o si lo gozaría, pero yo quería ser ya como él, ordeno que le llevarán su anillo, que estaba bien guardado en una vitrina de cristal y que usaba todas las noches que cazaba, le llevaron el anillo, se lo coloco en su dedo índice izquierdo, les dijo a las sirvientas que prendieran velas por toda la habitación, y que se retirarán, así lo hicieron, teníamos que estar los dos a solas.
Se acercó a mi de una manera muy sexi, comenzó a besarme, y me empujo hacia la cama, subió encima mío, continuo besándome, su anillo en forma de garra pasaba por todo mi rostro y mi cuello, me sentía un poco nervioso, pero a la vez comencé a excitarme, desabrocho mi pantalón, saco mi verga excitada y la comenzó a masturbar, bajo su cabeza, me acomodo de manera que yo quedara sentado, bajo más y comenzó a mamar, nuevamente esa sensación, el momento era glorioso, su garra tocaba mi abdomen, y lo acariciaba con su mano, volvió a subir a mi rostro.
-Estas listo?.- Me dijo.
-Creo que si! Que tengo que hacer?.- Le respondí.
-Sólo tienes que abrir la boca y beber de mi sangre.- Contestó.
ESTÁS LEYENDO
Mi Ángel del Infierno.
De TodoEsta es la historia de Juan, un chico inteligente y curioso que después de haber sido becado por la Universidad donde estudiaba, viaja a Eslovenia para investigar más a fondo acerca del Vampirismo, sin imaginar todo lo que le espera. Ahí conoce a u...