El primer día de clases, todos reaccionan distinto a el, tal vez unos con nervios y hasta miedo, otros con optimismo y alegría, depende de la persona claro.
Pero si la primera clase es de Transformaciones y no sabes quien es tu profesor, sumándole que vas tarde a dicha clase por quedarte dormido, puede ser un poco estresante.
Por los pasillos solo se veían a dos chicos correr a todo lo que podían (aunque fuese contra las reglas), por quedarse dormidos, a Harry y a Ron se les había echo tarde para su primera clase, además que casi se pierden por dar vuelta por un pasillo equivocado, puede que fuese algo tonto pero al pelinegro le parecía algo irónica la situación.-¿De que demonios te ríes Harry?- Ron y apenas podía respirar por tanto correr. Joder ni siquiera habían desayunado.
-... Es que ...- el otro jadeaba al hablar- es gracioso ¿no?... Creó que esto ya lo vivimos.
Mientras que Harry casi de atraganta con la risa, a Ron no le quedaba del todo claro a que se refería su amigo.
El primer año, ambos chicos con apenas 11 años de edad, se habían retrasado a su primera clase de Transformaciones con la profesora McGonagall. Solo que esta vez, seria distinto el profesor.
Cuando llegaron, el pelirrojo ni siquiera toco para pedir permiso, a lo que los dos entraron al aula. Todos voltearon a verlos, se avergonzaron de a ver interrumpido tan groseramente, la clase la compartían con los Revenclaw, así que todos ya estaban en sus lugares, Hermaione los miraba mal desde su lugar. Al mirar al frente, solo vieron el escritorio desocupado. Casi se habían salvado, solo casi.
-Normalmente, la gente toca antes de entrar a una habitación.
Una voz bastante molesta les dio escalofríos, era como si Snape estuviese a sus espaldas. Girando para ver quien era, dieron de frente con un hombre mayor, castaño, de mirada café bastante molesta. Era el que ocupaba un lugar en el comedor el día anterior, no parecía una persona agradable.
-Me dirán a que se debe su retraso, o acaso tengo que adivinar.
El comentario ácido si que les recordó al Profesor Snape.
- Lamentamos interrumpir la clase, solo se nos hizo tarde.- quien contesto fue Harry, ya que Ron parecía asustado de solo abrir la boca.
- Algo que pido es puntualidad, y eso ya lo mencione a la clase. Serán un perfecto ejemplo para que vean de que hablo.- el rostro del profesor permanecía imperturbable - Me parece que serán 10 puntos menos para Gryfindor. Y quiero a los dos fuera del salón. Al menos por esta clase.
Dicho esto abrió la puerta para ellos, quienes solo tenían la boca abierta sin saber que decir, se dirigieron afuera obedientes.
-Por cierto joven Weasley, joven Potter, yo seré su nuevo profesor de Transformaciones, Evan Romanov.
Dicho esto, les cerro la puerta en la cara. Ni uno ni otro podía procesar lo que acababa de pasar.
-...es como... Si fuese...- Ron al fin pudo reaccionar.
-otro Severus Snape... - Harry termino la oración. Ambos estaban pálidos a mas no poder. Lo único bueno, es que al parecer, si podrían desayunar.
...............................................................................
La primera hora para Draco, fue libre.
Así decidió salir de su habitación, le parecía un poco silenciosa siendo él el único en ella, sus compañeros de cuarto al parecer decidieron mudarse a otras habitaciones. Solo un montón de hipócritas, eso ya lo sabia mucho antes de la guerra.Tomando algo de comida de la mesa en el comedor, se dirigió a los jardines a desayunar.
El pequeño ave ya estaba consciente, y reposaba en un bolsillo de su túnica. Para el, llevaba semillas que pidió a un elfo la noche anterior, junto con su cena.Se sentó al pie de un árbol bastante alejado de la mirada de los demás. Saco el ave y lo puso en el pasto, estaba amaestrado, eso lo comprobó la misma noche ya que parecía entender bastante bien cuando le hablaba.
-No puedes volar aun, así que solo come.- dicho esto le colocó un platito de porcelana en donde vertió las semillas. Y el ave, obediente, comió cuanto quiso.
ESTÁS LEYENDO
Sombra
AcakDraco Malfoy entenderá que no es el único afectado por la guerra, tiene que soportar humillaciones constantes, pero una persona lo ayudara a salir de sus problemas, aunque él no quiera su ayuda. Con el tiempo lo empezara a ver diferente, echo que p...