10: "Golpe."

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Charlotte's POV (punto de vista)

Definitivamente todo estaba cayendo a pedazos, el mundo al que conocía desaparecía lenta y tortuosamente. Quizás en los peores momentos las personas demostraban quien eran realmente, quizás siempre viví engañada acerca de lo que me rodeaba.

Supongo que la vida era similar a un laberinto, tenías millones de caminos por los cuales seguir, muchos acabarían dejándote sin salida alguna y otros harían que dieras vueltas caminando siempre en el mismo lugar, siguiendo el mismo patrón. Pero solo uno podía conducirte a la salida y para llegar a él podrías tardar toda una eternidad sin conseguirlo. Encontrándote cientos de veces con las mismas escenas, los mismos lugares, las mismas personas..

Era un juego macabro que acababa con tu mente y tu cordura, obligándote a entrar en la locura constante de luchar contra los obstáculos, de mantenerte cuerdo a pesar de la demencia de las situaciones.

─ ¿Vas a ignorarme todo el maldito día? ─Escupió Justin entre dientes.

─ Funciona para mí.

Mi simple respuesta solo hizo que se pusiera de pie entre gruñidos furiosos y abandonara la casa sin pensarlo dos veces. Todo era confuso para mí, desde la confesión sin sentido de Justin hasta la ruptura impensada con Jason.

¿Acaso había una organización conspirando en mi contra? Porque cada paso mío era caída, cada caída un golpe nuevo y cada golpe un motivo más para dejar de luchar.

Siempre había sentido aquella invisible competencia entre Selena y yo, sus intentos burdos, pero aun así exitosos, por opacarme y dejarme un nivel más abajo suyo. Sus esmeros constantes por conseguir la aprobación de Jason. Y aunque costase admitirlo, la perra había ganado.

Había logrado en un cien por cien seducirlo, tenerlo en su cama, tenerlo detrás suyo y hasta debajo. Las cosas eran sencillas, yo era la idi*ota, ellos los amantes. La Cruel verdad sea dicha.

Jason's POV (punto de vista)

Mis manos temblaban levemente, el golpe era importante y aunque jamás en mi pu*ta vida había estado nervioso... ahora mismo una avalancha de abejas asesinas parecía estar batallando en mi estómago. Un simple paso en falso podía desatar una guerra entre dos bandas sumamente poderosas, todos sabían que nada superaba a The Murderers, pero enfrentarnos justo ahora no era factible.

Llegamos en la van negra. Isac y yo descendimos verificando que nuestras armas estuvieran cargadas, las guardamos en la cinturilla de nuestros jeans y luego de recibir el apoyo de todos, caminamos hacia el almacén.

─Recuerda lo de la...

─Cierra la maldita boca si no quieres que ponga una bala en tu frente. ─Escupí entre dientes.

Él solo alzó sus brazos en son de paz y mi mandíbula se tensó por completo. Conforme los pasos nos llevaban a la puerta, sentía una ligera taquicardia hacerse cargo de mí. Amaba la jodida sensación de adrenalina, el poder que implicaba ver a alguien retorciéndose en su propia sangre. Saber que quien dominaba era yo, que tenía su vida en mis manos y podía hacer con ella lo que me viniera en gana, nada superaba a esa sensación.

La puerta, de hierro oxidado, se abrió con brusquedad haciendo un estruendoso chirrido que no nos inmutó en lo más mínimo. Si algo habíamos aprendido con el correr de los años era que cuantas menos emociones mostraras, más cerca de desorientarlos quedabas.

─ Alec Harris. Has cambiado, si no te conociera creería que te has hecho hombre. ─Murmuré con acritud. Mi rostro reflejaba una clara visión de la seriedad que me caracterizaba, la falta de gracia, la ira corriendo por mis venas.

─ Él rio sin humor alguno─ Lo imbé*cil no se te quita, Jason.

─ Estás tentando a tu propia suerte y créeme, no me molestaría en lo absoluto verte ahogar con tu propia sangre.

Su mandíbula se tensó y supe que había dado en el blanco. Alec era un adolescente jugando a ser gángster, su estú*pido y patético temperamento sensible y fácil de asustar eran lo que lo hacía un blanco fácil para mí, y para todos.

Entramos al almacén encontrándonos con tres rostros conocidos: Brent Parker, Connor Scott y sin duda alguna Sebastian Ward. Esto sería sin duda alguna interesante.

─ ¿Quién diría que Jason McCann seguía vivo? ─Sebastian fue el primero en romper el silencio.

─ Me encogí de hombros sonriendo de lado y mis ojos se centraron firmemente en los suyos. ─ No le daría el gusto a ningún idio*ta de tener mi cu*lo en sus manos.

─Connor rió entre dientes acercándose a mí, intentando mostrarse amenazante y autoritario. Solo vi a un niño jugando a ser fuerte. ─ Pura mier*da, puedo asegurarte que tu cabeza estará en mi pared antes de que puedas darte cuenta.

El humor amargo se hizo cargo de mí, obligándome a soltar una cadena de carcajadas secas y duras. ─ Podría matarte con los ojos cerrados y las manos atadas, no pongas a prueba mi talento innato para matar imbé*les.

─Suficiente. No estamos aquí para esta mier*da. ─Isac detuvo la tensión casi palpable. ─ Han estado moviéndose en nuestra ciudad.

The Murderers jamás dejaba que una banda se infiltrara en su territorio, negociando y moviéndose libremente sin pedir permiso alguno. La autorización era primordial aquí, quien no la tenía pagaba las consecuencias. Y quien obtenía la dichosa autorización, claramente, se atenía a los costos de la misma. Nada es gratis en la vida y ellos lo sabían más que nadie.

─¿Y qué harás al respecto, Jason? ─Brent rió entre dientes.

Sonreí de lado, mis ojos se iluminaron completamente y sentí a la demencia hacerse cargo de mí, dominarme completamente. Error, Brent, no debiste subestimar-me.






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Ángeleeeeeeeeeeeees

Un millón de disculpas por la tardanza.

He acabado el Instituto, lo que significa que tengo el tiempo de sobra♥

Espero votos y comentarios<3

La novela va tomando su rumbo ¿Qué les parece que sucederá? *O*

#Annie.






» Abusive ━Jason McCann. [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora