Dos sorpresas

2.7K 93 17
                                    

Capitulo 31: Dos sorpresas.

NICOLAS

Cuando Male salió corriendo del hospital, solo quería darle un buen golpe en la cara, a ese idiota. ¡¿Cómo se atrevía a hablarle de esa forma?! ¡Me las iba a pagar el maldito!

Pero justo cuando estoy por tirármele encima, llegan unos policías, que por su olor eran vampiros y licántropos. Ellos me sacaron a rastras de la habitación, mientras maldecía con todas las palabras que conocía.

Iba a intentar entrar de nuevo, pero un dolor en mi pecho me recordó que Male estaba mal. Así que olvide a Tomas y corrí en la dirección que me guiaba su aroma. A medio camino ya sabía hacia dónde me dirigía, a su casa. Al llegar estaba pensándome en entrar por la puerta, pero no quería esperar a que me abrieran, perdería demasiado tiempo. Así que me dirigí a su ventana, y con un impulso salte hacia la pared contraría. Y con la fuerza de mis piernas llegué a la ventana. Ahí la encontré junto con sus padres, ella estaba en la cama y no dejaba de llorar. Ellos al verme se pararon de la cama, y antes de salir de la habitación, la madre me susurró un “ayúdala”, y yo asentí. Ellos se fueron y Male levantó la cabeza para ver como cerraban la puerta.

-          ¿Male?- pregunté acercándome hacia ella.

Ella volteo hacia mí, y vi como sus lágrimas rodaban por sus mejillas, su cara no cambio en ningún momento siempre mostraba dolor. Me senté en la cama y ella se acurruco junto a mí, para continuar llorando. No eran necesarias las palabras, ya sabía que se sentía horrible. La abracé y ella también, sus sollozos nunca se detuvieron, pero fueron más lentos y no muy fuertes como antes.

Al final, yo me quedé acostado en la cama y ella dormida sobre mi pecho. Ya era entrada la mañana, y de vez en cuando soltaba un sollozo entre sueños. Le acariciaba el pelo, eso parecía calmarla.

Me iba a parar, aún tenía que hablar con los padres de Malena sobre algunos asuntos. Pero ella me detuvo, al parecer se había despertado, y ahora me agarraba del brazo.

-          No me dejes…no ahora- me pidió con miedo.

-          Tranquila, nunca lo haré- le dije sonriéndole.- Ahora vuelvo.

Cuando ella asintió y me soltó, salí del cuarto. Bajé las escaleras, y me encontré con los padres de Male sentados en el sillón de la sala.

-          Nicolas- me dijo la madre parándose, su esposo la imitó.- No sabes cuánto te agradezco que hayas venido.

-          No hay problema.- dije restándole importancia.

-          ¿Qué fue lo que pasó? Ella no nos lo quiso contar.- me dijo su padre preocupado.

-          Es Tomas…él la llamó de una forma muy horrible.

-          ¿Ya despertó?- dijo la mujer.

-          Sí, pero aún sigue molesto- dije cruzándome de brazos.

-          ¿Qué le dijo?- preguntó su padre apretando sus puños.

-          Preferiría no decirlo- dije mirando para otro lado.- Pero creo que Male tiene que alejarse de él por un tiempo. Hasta que se calme y deje que ella hable y se explique.

-          Creo que eso no será problema- dijo la mujer, yo lo miré extrañada- Era una sorpresa pero…hemos invitado a unos amigos de Male, son de su otra escuela.

-          Nosotros nos iremos por las vacaciones de invierno, así que tendrá dos semanas para estar con ellos…creo que ese tiempo será suficiente para que se calme- dijo el hombre.

No es tu vita, es mi animaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora