15#: Helel existe

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Aviso: basé el capítulo en algunos comentarios. Créditos de ideas a: XieRyu

Abrí mis ojos con lentitud, más por cansancio que por dejar el suspenso. La verdad era que tenía demasiada curiosidad por cómo se veía Dios y, a la vez, unas grandes ganas de mandar todo a la mierda y desmayarme. Sin embargo, si hacía lo que yo quería más, mi lección de «ser fuerte» no serviría de nada.

Ahogué un grito cuando mis ojos se adaptaron a la luz y observé la persona que se encontraba enfrente mío.

—¡¿Morgan Freeman?! —grité.

Una carcajada sonó por toda la habitación. Aún recordaba la voz de aquel actor de las películas.

Cómo... ¿cómo mierda era posible? ¡¿Hablaba en serio?!

—¿Es así cómo me ves? —preguntó.

—¿A qué... s...se refiere? —tartamudeé—. ¿Acaso usted no es Morgan Freeman?

—Por supuesto que no. Solo soy Dios. Los demás me ven según como a su imaginación se le antoja; seguido de su costumbre. Tú me has visto varias veces en las películas como Morgan Freeman y mayormente me imaginaste como él, ¿no es verdad?

—Siendo honesto, me imaginaba a un señor con barba blanca y con cara de violador de palomas.

—¿Violador de palomas?

—Ya sabe, por los ángeles...

—Ellos no tienen alas —dijo con paciencia, extendiéndome la mano. Me dio miedo tomarla—. Los humanos creyeron que tenían alas debido a que uno de los ángeles utilizaba a las palomas para darles mensajes a su amor humano. El ángel utilizó sus poderes para visualizar los climas y decírselos a aquel para cuidar sus cosechas. Cuando los humanos notaron que aquella persona tenía demasiada suerte, le espiaron. El humano despidió a la paloma diciéndole "ángel mío", y los demás solo vieron a algo volando con brillantes alas blancas. ¿Comprendes el mito?

Tomé su mano luego de escucharlo y me puse de pie. Por alguna razón, apenas toqué aquella mano con arrugas, el cansancio solo era historia. ¿Me había recuperado por los poderes de él? ¿Esto era lo que pasaba cuando te encontrabas con Morgan Freeman?

—No sabía que los ángeles se enamoraban de los humanos —admití, tocándome el cuello. Aún las marcas nuevas de los colmillos seguían allí—. Hasta que conocí a papá. Está obsesionado con mamá. Su casa es...

—Una galería de fotos —completó Dios, riendo. Me daban ganas de apachurrarlo—.  Piensa en ella todos los días debido a su bondad. Lamentablemente, no puedo ver lo que hacen todos los humanos, pero sí mis hijos. Son de mi propia sangre y cuerpo.

—¿Te refieres a los ángeles?

—Exacto.

—¿Entonces sabes lo que yo hago? —interrogué.

Él negó con la cabeza. ¿No había ninguna cámara aquí? ¡Mi piel se estaba volviendo de gallina! Alguien tan famoso como Morgan Freeman...

—Naciste en la Tierra. Todo lo que nació en la Tierra, está fuera del alcance. Por ello, cree a los ángeles; cometí el error de crear al humano y dejar que se lo lleve el mal.

—¿Hablas de Satanás? —pregunté.

Morgan Freeman frunció el ceño.

—Su nombre real es Helel, o mejor dicho, Lucifer. Fue uno de mis primeros hijos; el portador de la luz. Gracias a él, existe la luz. Y ahora, también, la oscuridad.

Sed de amor (Yaoi-Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora