"It was just like first love"
Elizabeth Clare es una chica normal, con sueños y grandes expectativas. Su vida nunca ha sido de aquellas en las que las aventuras se hacen presentes a la vuelta de la esquina, más bien, esta historia comienza donde Liz...
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Casi creí por un momento que iba a caerme, pero en realidad mantenía mi equilibrio perfectamente. Creí que arrastraba las palabras cuando hablaba, pero pronunciaba todo a la perfección. Se trataba de un sucio y ruin juego que me jugaba mi mente.
Tras de mí, Levi se balanceaba canturreando mi nombre en diminutivo, con la chaqueta en la mano, ya que estaba demasiado acalorado para ponérsela. Le arrebate la prenda de la mano y me la puse sobre los hombros.
Dos cuadras antes de llegar a mi casa, el efecto juguetón de desvaneció de nosotros, dejando solo un par de cuerpos cansados y mentes distraídas, y una canción mal tarareada cobrando vida bajo los labios de Levi.
Lo observe. Había un grillo sonando de fondo mientras el entonaba su melodía. Al regresarme la mirada, cantó más fuerte, y el eco que provoco su voz en las calles vacías llegó a mis oídos con un escalofrió.
—"Met in the club, her name was Lola. Champagne tasting Coca-Cola. In the hands of my loving, oh, my love does her good".
Sonrió y sin pensarlo dos veces, tomó mi mano y me dio una vuelta.
—"All us boys need something that they got".
Se acercó a mí por detrás y me levantó. Deje salir un grito de espanto seguido por una risa boba gracias a su canto. En ese instante me di cuenta de cuanto lo quería.
Era tan gracioso sin querer serlo, y tenía tanta suerte de que se haya fijado en mí. No siempre un artista local —que cada vez se hace más famoso—, se fija en ti. Y gracias a todos los santos en los que la gente se empeñaba en creer, puso sus ojos sobre mí, y me quiso. Me marcó y una parte de mi le perteneció desde el momento en que su piel hizo contacto con la mía.
—"This one's for Elise".
Y ahí estaba, aquel amor profesado sin necesidad de decirlo. Con su mirada, opacada por la falta de luz, pero aun así vibrante y cautivadora. Sin ni siquiera darnos cuenta, estábamos bailando divertidamente de nuevo en la puerta de mi casa. Tanteaba mis bolsillos en busca de las llaves, mientras Levi movía ágilmente sus pies, acompañado por su silbido, que le daba vida a la canción.
No me sorprendió que tuviera tan buena voz, ya que su voz sola, sin ningún esfuerzo era ya sensual y bella, imaginármela en una canción no fue difícil, y escucharlo cantar fue muy placentero.
Una vez dentro de casa, abroché su chaqueta y subí corriendo las escaleras con él pisándome los talones. Estaba ansiosa.
En mi habitación, sobre la cama, había una pequeña caja color azul, sin ningún tipo de adorno, que tenía una divertida etiqueta al estilo de Alicia en el País de las Maravillas que decía "Ábreme".
No puedo describir la reacción de Levi ante el pequeño regalo más que diciendo que sin siquiera saber lo que había dentro, se inclinó y beso mi cabeza con furor, lo que me decepciono un poco, porque esperaba otra cosa.
