Capítulo 3: Nubes rojas

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La tensión me mataba por dentro, pero Pain se acercó a mí y me puso la mano en el hombro.

-Esta bien, serás parte de la organización, bienvenida. Aunque ya veo que conoces a Itachi y a Kisame, te presentaré a tus nuevos compañeros-

Me dirigí al interior de la guarida con los tres que estaban fuera conmigo, emocionada y contenta de estar ahí, a conocer con los que iba a convivir.

Al adentrarme, vi a todos los Akatsuki, hablaban entre ellos, todos con la misma túnica, por lo que veía no gastaban mucho dinero en ropas complejas, debe de haber un tacaño en el grupo...

Pain alzó la voz, extendiendo los brazos.

-Escuchad! Una nueva miembro de Akatsuki convivirá ahora con todos nosotros, su nombre es Leben, presentaos y enseñadle donde se instalará.

Todos se acercaron a verme, un chico, o quizás... media planta, no sé...había salido del suelo!

Era muy alto, al menos sus hojas a cada lado de su cuerpo le hacían ganar altura, tenía el cuerpo en dos mitades, mitad blanco, mitad negro, sus ojos amarillos, el del lado negro, un simple punto de ese color. Se acercó a mí, con su voz fría y medianamente emocional.

-Hola... Soy Zetsu, encantado...- Me quedé algo sorprendida al verle, prosiguió hablando.- Soy el espía de Akastuki, me aseguro de que todo vaya bien- Asentí algo intimidada, sonreí, cuando iba darle la mano en señal de que estaba encantada de conocerle, alguien le empujó a un lado y me agarró la mano con fuerza zarandeándola rápidamente.

-YO SOY TOBI!! ENCANTADO! ERES MUY MONA, LEBEN!!- Sorprendida, vi como un tío con una máscara naranja en espiral, con un ojo negro en ésta, su pelo corto desaliñado negro, y guantes del mismo color, me zarandeaba ya el cuerpo al estrecharme la mano con tal fuerza.

-VA....VALE!!! ENCANTADA!!- En ese instante alguien agarró a Tobi por el cuello de la túnica y lo lanzó hacía atrás.

-Tobi, no sabes tratar a una dama...-me cogió de la mano, mirándome a los ojos, y me besó ésta suavemente.

-Yo soy Hidan, dime monada, crees en Jashin?- Tenía los ojos violetaceos, el pelo gris repeinado hacía atrás, y era pálido. Esbozó una leve sonrisa esperando mi respuesta.

-Erhm...lo siento, no creo en ninguna religión...- Le devolví la sonrisa deseando no haberle ofendido.

-Eh?! Pero si Jas...- Sus palabras fueron interrumpidas siendo apartado a un lado de un puñetazo por un tío todo lo contrario a él físicamente.

Era alto, ancho de hombros, muy moreno, con la túnica abrochada hasta arriba, como algunos miembros, su cara estaba tapada por una máscara gris y negra. Sus ojos eran verdes y por fuera rojos.

-Claro está, lo mejor es el dinero, no hay nada mas fiable! Soy Kakuzu, el tesorero de Akatsuki- Me estrechó la mano levemente. Acababa de encontrar al tacaño de la organización. Me miró a los ojos, yo aun seguía perpleja por las presentaciones anteriores, y parecía que nadie se atrevería a apartar a Kakuzu.

Una voz interrumpió el silencio y nuestra cálida cogida de manos.

-Lo único que hay bueno en esta vida es el arte eterno- Un joven se acercaba a mí, calmado, severo, tenía el pelo corto de color vino, ojos marrones, pálido, al andar sonaba como madera. Me agarró la mano suavemente y me la besó, me lanzó una mirada intensa.

-Soy Sasori, encantado, Leben- Le sonreí tímidamente, la voz de Tobi surgió sin más.

-HEY! Y Deidara-senpai? Dónde esta?- Zetsu le respondió con esa voz apagada, saliendo nuevamente del suelo, no me di cuenta de cuando se fue.

-Está cerca de aquí, haciendo su arte, en el bosque- Observaba la conversación entre el pirado enmascarado y la planta espía, Pain le dirigió la palabra a Sasori con tono de orden.

-Sasori, ve en busca de Deidara y tráelo de vuelta, para que conozca a la nueva- La respuesta de éste fue directa.

-Entendido- Me soltó la mano y fue en su busca, mientras tanto, Hidan me hizo una seña para que le siguiera.

-Ven, te enseñaré entretanto los sitios que has de conocer como miembro- le seguí.

Al volver, Hidan seguía hablándome del Jashinismo, su religión, trataba de convencerme de que me uniera mientras me enseñaba los sitios de interés como integrante de Akatsuki. Me fijé que Sasori llegaba conjunto un chico de pelo largo rubio, con una coleta en lo alto de la cabeza, y los ojos azules.

Su cara no mostraba mucha emoción y alegría ante la idea de conocer a alguien nuevo. Le dijo a Sasori con desgana:

-Sasori no Danna, no quiero conocer a nadie! Déjame con mi arte! Hm!

-Son ordenes de Pain- Sasori se fijó en que llegaba a lo lejos conjunto Hidan, me puse enfrente del rubio, y me atreví a hablar la primera.

-Hola, soy Leben, encantada

-Yo Deidara, encantado, hm...- Nos miramos a los ojos, sentía como los míos brillaban al igual que los suyos. Él estaba levemente ruborizado, nos quedamos sin decir nada, no había palabras para describir lo que sentía en ese momento.

Nuestras emociones se vieron interrumpidas por un manotazo por parte de Hidan hacia Deidara que casi le tira al suelo.

-AAANDA EL ARTISTA SE HA ENAMORADO!!!- Hidan soltó una risa de loco, Deidara se sonrojó más y miró con mala cara a Hidan, le gritó.

-YO NUNCA ME ENAMORARÉ! SÓLO ESTOY ENAMORADO DE MI ARTE! HM!

Deidara se ruborizó y me miró a los ojos, se mordió el labio tímido.
Ya he conocido a todos los miembros de Akatsuki, cada cual más peculiar...

Secretos de tela: La historia de LebenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora