Capítulo 15

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Capítulo 15 



Plagg.



Había visto morir Chat Noirs, como si fuesen un ciclo sin importancia. Había comprado miles y miles de ramos de flores, y colocarlos sobre la tumba de su antiguo compañero ya se le había hecho repetitivo. Sin embargo, en algún momento él había sido el primero de todos. Quien ahora era tan sólo una guía, un personaje secundario sin importancia... Antes fue un protagonista.

Se aferró al anillo roto cuando estuvo sólo en la habitación de Adrien y lloró. Aquello era lo único que le quedaba.

Comenzó a recordar...


**

Su padre lo había llevado a las profundidades del bosque. No era extraño para el Plagg ya que siempre iban de caza, pero esta vez, la mirada del hombre le decía que significaría una despedida.

—Esto es algo especial, pero debes cuidarlo con todo tu corazón —Le dijo. Plagg no recordaba su rostro, pero si su mano ofreciéndole el anillo—. Es lo más preciado que encontrará el ser humano en este planeta.

—¿Qué es?

—Lo descubrirás más tarde. El mago que recién ha llegado a nuestro pueblo me ha dicho que eres especial, pero que cuando te lo diese... Debía alejarme de ti.

Plagg observó el anillo, lucía como cualquier otro.

—Entonces no lo quiero, papá. ¿Por qué debería alejarme de ti?

—Tómalo o no te perdonaré. Úsalo cuando ya no me veas.

El niño de cabello azabache siguió las indicaciones de su padre tal como él le había pedido. Y allí, en medio del bosque, una brillante luz espantó a los animales pero no a Plagg quien se había transformado en un gato.

Al escuchar el sonido de una rama quebrarse, se escondió detrás de un árbol.

—¿Quién está allí? —preguntó una voz femenina—. ¿Hola?

Plagg dio un paso y se dejó al descubierto. La miró temeroso. Frente a él había otra niña de su edad, rubia y de ojos aún más claros que el mar. Su vestimenta era aún más extraña que la de él, pues lucía como una mariquita.

—M-mi nombre es... Plaggot.

—¿Un gato? ¿Plaggot? ¿Te llamas así? —la pequeña comenzó a reír. Le extendió la mano para luego estrecharla con la de Plagg—. Mi nombre es Niria, parece que es el destino.

Plagg no pudo evitar sonrojarse ante tal contacto físico.

—Un gusto, Niria.

—¡Basta de formalidades! Por lo que veo, tengo un compañero —sonrió—. ¡Qué suerte! Me sentía muy sola. Ven, te enseñaré algunas cosas.

Pasaron los años, y ninguno de los dos aún había visto su verdadero rostro a pesar de saber sus nombres. Sin embargo, acordaban reunirse todos los días en la playa al atardecer. Fue cuando el Plagg de siete años, había crecido y cumplido los dieciséis que todo se derrumbó.

—¡Ah, lo que más odio son los sujetos que secuestran a las damas! —exclamó. Giró su bastón de madera y lo apuntó contra los cuatro hombres que se encontraban apoyados en una pared, muertos del miedo—. ¿No es cierto, Niria?

—Por supuesto. ¡Los detesto! ¿Qué haremos con ellos Plagg?

El adolescente se cruzó de brazos.

—Oye, te dije que mi nombre es Plaggot.

—Pero Plagg suena mejor, y es corto —le discutió la chica quien terminaba de hacer una trenza con su cabello rubio.

—Argh... No importa. ¡CATACLISMO! —su poder brotó de su pecho y juntó sus manos.

Cuando estuvo a punto de lanzarles tal poder a los hombres, uno de ellos la tomó como rehén y se protegió usándola de escudo. No le dio tiempo a Plagg a detenerse y cuando se dio cuenta de lo que había hecho, el cuerpo de Niria se hallaba en el suelo.

Los sujetos aprovecharon el momento para escaparse. El joven corrió hacia ella y la tomó entre sus brazos.

—¡NIRIA! —gritó desesperado dandole golpecitos. Intentó abrir sus ojos pero no había caso—. ¡Despierta, demonios! ¡No estoy jugando! Oye...

—Te quiero... —dijo con todas sus fuerzas mientras su traje desaparecía.

—No, espera. Yo... —Plagg rompió en llanto.

Apoyó su cabeza en el pecho de la joven y no escuchó ni un sólo latido. Empalideció.

Niria permaneció con los ojos cerrados, pero con una sonrisa. Se aferró a ella.

—Lo siento... Lo siento —repitió una y otra vez abrazándola, pero no había caso. Ella no volvería. Jamás estaría a su lado.

Sin que el pitido se escuchara, él también comenzó a transformarse en Plagg. Su anillo se quebró en dos y cayó al suelo. Había matado a su compañera con sus propios poderes.

Una voz se presentó en su mente.


No mereces ser Chat Noir.


—¿Chat Noir? ¿Yo...? ¿Éste poder se llama de esa forma? ¿Qué pasará con ella? —exclamó en medio del llanto.


Otra chica aparecerá para reemplazarla, y se llamará Lady Bug. Pero tú, tú ya no eres nada.


—Nadie podrá reemplazarla —dijo con voz ronca—. Yo podré ser reemplazado pero ella...


Te convertirás en un guía para los próximos Chat Noir. Esta será tu segunda oportunidad.


**

—¿Sigues llorando? —la voz de Adrien se infiltró en sus pensamientos—. Mira, te traje queso para levantar tu ánimo.

—Gracias, Adrien...

—Llamé a Marinette, ella y Tikki vendrán en un rato.

Plagg se escondió detrás de su flequillo. Cerró los ojos. Inhaló y exhaló. No estaba preparado para hablar con ella luego de tantos años. 



***

Espero que se entienda D,:  
Dibujé a Niria porque creo que les ayudaría un poco al imaginársela ya que es un personaje ajeno a la historia uvu Aunque quizás luego haga algún dibujo de ella y Plagg juntos. Lo subiré a mi página:  www.facebook.com/marsgorey   Allí también me pueden mandar sus dibujos <3 



¿Quién eres tú? Miraculous LadybugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora