Carlos corría lo más rápido que podían sus pies permitirle. Incluso era más rápido que la vez que estaba huyendo de Chico. Necesitaba encontrar a Astrid y explicarle lo del día anterior. No había podido dormir esa noche, la mirada dolida de la princesa lo había perseguido desde entonces. La culpa llenaba su pecho y no sentía nada de paz en su cabeza.
Mucha gente se tropezaba por su culpa pero no le importaba tanto cómo lo de Astrid.
Entonces Carlos la vio en frente de su casillero sacando libros.
Algo en su pecho se contrajo cuándo empezó a bajar la velocidad al acercarse a ella.
Y de un momento a otro ya estaba junto a la princesa.
—Astrid... —dijo él. Entonces la princesa se volvió él mientras metía otro libro en su casillero.
—Hola... —dijo ella suavemente mientras lo miraba.
Carlos notó algo en su mirada, ella no parecía enojada, ni dolida, ni siquiera parecía sentir odio hacía él. En su murada no había ningún sentimiento, ni siquiera bueno, y eso fue lo que le dolió más.
—Con respecto a lo de ayer... —dijo Carlos con voz entrecortada.
—No es necesario, Carlos —dijo Astrid— No estoy molesta, lo consideré y tienes razón.
—¿Qué? —preguntó Carlos.
—Tienes toda la razón, tú y yo no somos nada más que dos chicos jóvenes que no saben nada de la vida todavía. Y me abriste los ojos cuándo lo dijiste, yo no puedo estar en una relación ahora, tengo un deber al ser la guardiana de la rosa y eso es lo más importante —dijo Astrid en tono frío.
—Astrid... —dijo Carlos tratando de no hacer cómo que las palabras de ella dolían— Yo en serio no quise decirlo...
—Pero lo hiciste —La chica se volvió a su casillero y metió la mano para sacarla en forma de puño— Tal vez, haya algo para nosotros en el futuro, juntos... O por separado, sin embargo... Por ahora... Tal vez sea separado.
Astrid tomó una mano de Carlos y la abrió con delicadeza, acercando su puño a la mano de él y Carlos sintió cómo ella dejó caer algo. Cuándo apartó su mano vio el collar ahí.
El collar que él le había obsequiado.
—No... —trató de decir él.
—Carlos, no hay que hacerlo más difícil... —dijo la chica.
—Pero... —dijo él tratando de buscar algo que decir.
—Oye... —ella lo frenó— Dejémoslo así...
Carlos quiso hablar y protestar, no creía que eso estaba pasando. Astrid en serio lo estaba dejando ahí.
La chica sin decir nada cerró su casillero y se alejó de Carlos.
El peliblanco/negro miró a la chica y respiraba fuertemente con el corazón acerelado.
¿En serio eso acababa de pasar?.
—¡Carlos! —él escuchó una voz detrás de si y observó a Evie correr hacía él.
—Evie... —Dijo él.
—Dos cosas... la primera, que ¡Doug me ha invitado a una cita! —dijo la peliazul— Segundo, tienes que acompañarme, porque Ben te está buscando.
***
—¿Y cómo estaba Astrid ayer? —preguntó Urell soltando su mochila en la arena.
Melody suspiró tomando su brazo derecho.
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La princesa de Auradon [Descendientes/Carlos De vil] LPDA1
FanfictionToda la saga "La Princesa de Auradon" está dedicada a Cameron Boyce, la estrella más brillante en el firmamento. "Hoy es un día emocionante, ¡Mi hermana vuelve!."-Dijo Ben con entusiasmo. -"¡¿Hermana!?"-preguntaron los 4 chicos al unísono ...