capítulo 19. me gusto por...

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Salía de clases acompañada por Janethe, Lizeth y Meghan como es la costumbre; de pronto no sé como surgió una plática acerca de chicos qué resulto bastante larga:
-hay un chico qué me gusta aunque no lo conozco en si pero es alto, delgado, cejon y guapo, muy guapo.
-Ay Meghan, sin duda no podía faltar lo cejon.
-jajaja si, es lo principal Débora. Además nada qué ver tus gustos con los míos.
-pues a ti ¿Como te gustan Débora?
-¿Es en serio Janethe, no sabías qué le gustaba Nick?
-no tenía ni idea Lizeth.
-por cierto, a todo esto ¿Por qué te gustó? Es qué desde mi punto de vista no es muy guapo qué digamos.
-Meghan, no fue porqué sé me hiciera un chico guapísimo.
-cuenta entonces por qué.
-mmmm, chicas verán es una cuestión un tanto larga y confusa.
-no importa tú cuenta.
-bueno Janethe. Veamos, al principio cuándo lo conocí no tomé gran importancia y nunca pensé qué me gustaría; fue hasta qué ya era un poco tarde para comenzar a tratarlo y qué pudiera llegar a algo más qué amistad; en fin me Ando desviando del tema. Fue qué le puse algo de atención cuándo Ellie me hacía burla de qué parecía qué yo le gustaba, la tire de a loca pero precisamente un día al tratar de comprobar por mi misma qué es verdad me topé con su mirada qué no sé me pareció tan tierna y misteriosa al mismo tiempo lo qué me causaba más curiosidad es qué fuera un chico callado, fue supongo lo qué me enloqueció de él, qué su silencio acompañado de esa mirada me isócrona confianza y mucha tranquilidad; fue así como poco a poco me gustaba aún más, me encantaba su forma de ser y su voz, ¡Oh Dios! Su voz como resonaba en mi mente desde la primera vez qué platicamos porqué me agradaba como pronunciaba mi nombre, en pocas plantas me enamoré hasta de las cosas más insignificantes qué podrían resultar...
-define insignificantes.
-pues así, las cosas qué comúnmente la gente no sé pone a observar detenidamente; su mirada, su sonrisa qué aunque fuera en ocasiones pequeña y tal vez acompañada de un poco de timidez era lo máximo para mi, su firma de caminar, todo cada pequeño detalle; así me hubiesen dicho qué era un mujeriego, un patán, qué nunca me querría, para mi seguiría siendo un chico ideal.
-¡Wow qué intenso!
-Ay ternurita, qué hermoso.
-Débora, es neta resultas tan adorable por eso le gustas a los chicos.
-Meghan, ya te dije qué no estoy segura de ello.
-pero tienes ligue.
-a ver, mencioname uno.
-Nick.
-por Dios, Meghan no sé si alguna vez le gusté, igual y sólo le caía bien.
-¿Y si si le gustabas?
-Lizeth, ahora tú también con eso.
-puede ser.
-Ay gracias por apoyarlas Janethe.
-mira Débora, tú en ese pequeño tiempo lograste creo qué hasta conocerlo mejor qué Drake y eso qué ellos eran compañeros, sé conocían antes ¿Capichi?
-ok ok capichi, pero ¿Quién te dijo eso?
-Drake, me dijo qué le resultaba bastante extraño qué Nick tuviera tanta confianza contigo y qué platicara contigo más qué con sus propios compañeros; niégame qué eso es amor.
-no puedo ni negarlo ni afirmarlo pero lo qué si es qué si me dejó en la famosa "friendzone" por lo menos ya tengo un lugar específico en su vida y puedo hacerme a la idea definitiva de qué lo intenté pero no estuvo tan mal.
-seguro y le gustas; yo sé qué le.gustas.
-jajaja Ay Lizeth haz de ser adivina.
-pues yo opinó lo mismo qué Lizeth.
-y yo las apoyo.
-bueno, bueno chicas si le gusto o no es otro rollo; ahora vamos a casa qué nos espera una gran tarde qué estudiar.
-si, está bien pero le gustas(exclamaron Janethe y Lizeth antes de irse).
Meghan y yo nos fuimos mientras seguir insistiendome qué Nick y yo hubiéramos sido una pareja envidiable pero sobre todo tierna.
Bien pues este es él penúltimo capítulo, vaya qué sé alargo la historia

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