✝ Bloody Kiss ✝ ||Diabolik Lovers||

IX

✝Una Fructífera Propuesta✝ (3/3)

Yui había despertado, el efecto de la anestesia había pasado, y al retomar la consciencia se encontró con una escena que la confundió bastante; Ayato y Kanato estaban heridos y sangraban bastante, Aiko estaba parada en medio de ellos con la cabeza en alto, y los demás estaban para una foto; Reiji del asombro soltó al perro, quien fue corriendo directo a su ama, y ella lo tomo en brazos de manera protectora.

— ¿Q-qué demonios...? — susurró el pelirrojo sorprendido tocándose el costado del estómago, donde Aiko lo había herido de manera profunda.

— ¿C-cómo pudiste? — preguntó el peli lila al borde del llanto, con una mano en el lado izquierdo de su rostro, lugar donde la peli magenta lo hirió también.

— Les dije, ustedes no me conocen — afirmó Aiko de manera desafiante.

— ¿C-cómo es que lo hiciste? — preguntó el pelinegro confundido, además de sorprendido.

La peli magenta puso delante de su cara la daga de plata de Subaru y sonrió con inocencia — La tome prestada — respondió de manera despreocupada.

El albino salió de su trance, y buscó entre sus bolsillos la daga que siempre lleva guardada — E-EN QUÉ MOMENTO... ¿CÓMO? NO ENTIENDO — gritó aturdido, viendo que no la tenía.

— He he — rió la oji carmesí - supongo que no te diste cuenta cuando te la saqué — le respondió, el albino seguía confundido — cuando me atacaste, antes de lanzarte, vi en tu bolsillo algo brillante, así que lo tome sin que te dieras cuenta — le sacó la lengua divertida, todos se encontraban en trance.

— Sigo sin entender ¿Qué eres? Un simple humano no tendría tanta fuerza como para saltar desde un techo, lanzar a un vampiro por los aires o detener sus golpes, menos una mocosa como tú — preguntó el segundo Sakamaki, ella lo miro mal, por haberla tratado de mocosa.

— Soy un ser humano común y corriente que sabe defenderse por sí sola, ¿Tan difícil de entender es? Qué extraño que una persona de apariencia tan intelectual y de carácter intachable le cueste entender una cosa que hasta el cabeza de tomate puede — respondió la peli magenta, diciendo lo último de manera sarcástica, con la intención de herir el orgullo del peli negro.

— ¿Qué te pasa con Ore-sama? — la atacó el pelirrojo, que todavía se encontraba en el suelo herido.

— Cállate que a ti nadie te habló Ore-baka — le respondió la joven de la misma manera.

— A-Aiko-chan — habló la rubia, que se levantó del suelo tambaleando.

— ¡Yui! — corrió la peli magenta ayudarla — ¿Ya estas bien? — le preguntó preocupada.

— S-si — le respondió — ¿Qué sucedió? —

— Nada, ya pasó, ahora vámonos — le susurró lo ultimo tomándola en brazos, a punto de irse, pero como siempre fue detenida.

— ¿Quién les dio el permiso de irse? Esto aún no ha terminado — aclaró el pelinegro.

— ¿Ahora hay que pedir permiso? No me vengas con estupideces Megane — se quejó enojada Aiko— Esto ya terminó, no pudieron matarme, y no lo van a poder hacer, ríndanse de una vez y déjennos irnos en paz —

— Pero... — el peli negro fue interrumpido por su hermano mayor.

— Que molestos son — hablo un rubio perezoso que se encontraba apoyado en una de las columnas — solo deja que se vaya, ella no tiene nada que ver en esto.

— Shu ¿Qué cosas dices? ¿Después de todo el alboroto que armó vas a dejar que se vaya como si nada hubiera pasado? — preguntó enojado el peli negro a su hermano.

— Pero ya terminó, que se vaya, y no molesten — se quejó el rubio. Todos lo miraron rubio con cara de ¿Qué estupideces estas diciendo?

— ¡Genial! Vámonos Yui — dijo feliz la peli magenta a punto de irse.

— Un momento — las detuvo el peli negro — que la mocosa y el perro se vayan, pero la humana esa se queda —dijo despectivo el peli negro señalando a la rubia.

— ¿QUÉ? ¿POR QUÉ? - gritó Aiko — ¿OTRA VEZ CON LO MISMO? — gritó alterada, estaba harta de que siempre le pongan obstáculos, ella solo quería largarse de allí con su amiga y no volver a saber más nada de los vampiros nunca más.

— Aiko-chan — llamó su atención la rubia — Estaré bien, yo me quedo, tu vete tranquila — le respondió esta con una sonrisa, tratando de tranquilizar a su amiga, aunque por dentro no quería separarse de ella.

— Pero no puedo irme y dejarte aquí, morirás, estas cosas chuparán tu sangre hasta matarte —dijo la oji carmesí.

— Lo sé, pero no queda otra — le respondió la rubia, resignada.

— Entonces que ella también se quede — acotó el castaño de sombrero. Todos giraron a mirarlo a él, quien sonreía divertido por la idea que se le había ocurrido.

— Raito ¡deja de decir cosas sin sentidos! Al parecer el bueno para nada ese te contagió su estupidez — se quejó el pelinegro señalando al rubio despectivamente.

— Yo apoyo a Raito — opinó el pelirrojo, que seguía en el suelo herido — pero ella será de Ore-sama — señalando a la peli magenta, quien lo fulminó con la mirada.

— Teddy y yo estamos de acuerdo — opinó también el peli lila — habrá otra muñeca con quien jugar ¿Nee~ Teddy? — le pregunto a su oso, con su típica sonrisa psicópata.

- Tsk, solo quédate si quieres y si no vete, esta situación me está hartando — se quejó el albino —ya sabemos que no te irás sin ella — señalando a la rubia — entonces que se quede — aclaró.

— Araa ~ ¿Acaso Subaru-kun se encariño con Usagi-chan? — dijo el castaño con intenciones de molestar al albino, quien solo se sonrojo y comenzó gritar.

— ¡C-CÁLLATE YO NO HE DICHO ESO! — grito alterado el albino con un pequeño sonrojo, Raito río divertido.

— ¿Es en serio? Dejar que una intrusa se quede en la mansión, que desagradable —se quejó el peli negro, pero como vió que todos estaban de acuerdo con la propuesta, se ablandó un poco — Tsk, sino queda otra — susurró acomodándose los anteojos y retomando su compostura intimidante, porque, aunque el no quisiera admitirlo, también le convenía tener otra muchacha en la mansión.

(narra Aiko)

— Y bien ¿Qué dices Aiko-chan? ¿Te quedarás conmigo? — me pregunto Yui. Miraba indignada a todos los vampiros, « ¿¡QUEDARME!? ¿¡EN UNA MANSIÓN!? ¿¡CON 6 VAMPIROS!? »

¡NO, NO NO Y NO! IMPOSIBLE! E-es decir, jamás salí de mi casa, y por primera vez que salgo en mi vida, es solo para volver a encerrarme en otro lugar, pero ¿¡EN UNA MANSIÓN DESCONOCIDA CON 6 VAMPIROS!?? Aunque ya me haya tomado el tiempo de recorrerla un poco cuando estábamos huyendo de los vampiros, sigue siendo desconocida para mi, ya que jamás estuve en una mansión como esta antes.

«¿¡QUÉ HAGO!??? » pensaba, bajo la mirada de todos los vampiros y Yui quienes me miraban intrigados, esperando una respuesta de mi parte.