Aaron POV
-Se está acercando tu noviecito.- soltó mordazmente Azael en mi mente- Es tu maldita culpa lo que le suceda a ese chico, tú le diste nuestra ubicación con ese condenado grito, ¿Estás listo para ver morir a tu chico?
Azael estaba al mando de mi cuerpo, tristemente no había nada que yo pudiera hacer para expulsarlo de mi mente. Traté de mil maneras ser más fuerte que su control mental, pero siempre fallaba en mis intentos.
Ahora estamos aquí, en medio de un claro en el bosque, esperando a que Elliot llegue, ¡fui un estúpido, no debí gritar! Pero la necesidad que sentía por hacerlo fue tan grande, podía sentir a todos mis amigos al borde de la muerte, también sentía la debilidad de Elliot, además del fuerte dolor que sentí al ser separado de Omen. Es irónico que el único momento en el cual pude obtener el control de mis acciones haya sido durante el grito, un estúpido grito que ahora atrae a Elliot hacia su perdición.
- ¡Maldito bastardo! No podrás salirte con la tuya.
-¿Y quién me va a detener? ¿Tu grupo de elementales patéticos de los cuales mis esclavos se deshicieron? ¿Quizás tu novio, el elemental de la luz que en este momento agoniza por la debilidad que le causa la ausencia de luz? ¿O me detendrías tú, un simple espectador de la situación, condenado a observar como tu cuerpo es manejado pero no eres tú quien das las órdenes? ¡Qué asco me da que ostenten el título de Reyes elementales!, ni siquiera conocen a fondo lo que pueden hacer. Pero más asco me da que tú, una Banshee debilucho, que ni siquiera puede evitar ser controlado y esclavizado mentalmente, se haga llamar "el rey elemental oscuro"- Cada palabra que este ¿hombre? ¿Joven? ¡Éste ser en mi cabeza!, pronunciaba era tan cargada de odio, que incluso me sentía herido.
-¡Parásito mental asqueroso!- quizás los insultos me ayuden a evitar sentirme tan mal.- ¡Volviste a la vida gracias a mis poderes! Tal parece que no soy tan débil como parece. Aunque bueno, resucitar a una rata como tú no es tan difícil como parecía.- Espeté con Sorna
-Una palabra más, y te enviaré a la parte más profunda de tu subconsciente, justo donde se encuentran tus preciadas voces, tu "Omen"- Azael se burló tan fuertemente que su voz hizo eco a través del bosque- Dime, Aaron ¿qué es una banshee sin las voces que le susurran los presagios?, ¿qué es una banshee sin la capacidad de predecir la muerte? ¿Qué es una banshee sin la habilidad de gritar? Si no he entendido mal, tu especie era una de las más codiciadas, poco comunes y respetadas por esa habilidad, Poder ver la muerte de las personas, tener la capacidad de cambiar el futuro, ¿ahora sin tu Omen, qué eres? Déjame decirte, mi no tan buen elemental oscuro, que sin tus presagios y gritos, eres tan común e inservible como un Minotauro.- volvió a lanzar una carcajada al aire- Y pensar que la existencia de toda una especie recaía en ti y en tu madre. Vaya desperdicio...
-Te voy a...
-Silencio. Tal parece que está llegando romeo.- Azael dejó de reír y guardo silencio por un momento.
A la distancia pude escuchar claramente el batir de alas. Cada segundo que pasaba me sentía más nervioso y culpable, debí callarme, debí ahogar mi último grito. Debí salvar a Elliot, alejándolo de mí.
El aleteo se escuchaba cada vez más claro, hasta que finalmente, un gran ángel apareció surcando los aires, con muy poca gracia, sus movimientos eran torpes y parecía que tan sólo mantener el equilibrio le causaba fatiga. Elliot aterrizó ante mí, cayendo de rodillas por el cansancio. Levantó su mirada, encontrándose con mis ojos inexpresivos.
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Saga Elementos y Sombras II :Tierra Renaciente
FantasyLa guerra continúa, la caza de criaturas mitológicas y fantásticas sigue igual; pero ahora algo ha cambiado: un antiguo poder ha renacido y posesionado los cuerpos de seis Mythis adolescentes, ¡Los elementales han renacido!, y aunque hayan tenido un...