Capitulo 39

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Los días pasaban volando, todos siempre juntos, mi tío dejo a Thomas en casa para el seguir con su trabajo, Sara y Milena siempre pasaban conmigo, Ethan no se separaba de su padre, Matt iba y venía por el tema de la agencia. Decidí solo darme tiempo para estar compartiendo con mi hijo y dejar el amor de lado. A pesar de todo Matt y Peter siempre se llevan bien, conversan por horas por las noches en el jardín los escucho desde mi balcón. Me entienden perfectamente, de mis padres nada se sabe y de Francisco Miller no hay pistas, todos suponen que escapan juntos.

Cass se fue con Daniel a Washington justo el día que llegue, el colegio cerró nuestros años gracias a mi tío y sus influencias, estamos graduadas dos meses antes de que el año escolar acabe. Agradezco que ya sea de noche, entre Ethan, Thomas y Milena, ellos se llevan todas mis energías y las de Sara. Ethan duerme conmigo y Thomas en la habitación de Ethan. Sara y milena duermen en una de las habitaciones de invitados, Peter y Matt en otras. Mi tío nunca se queda. Nora utiliza la habitación que antes era de Lili y la habitación de Nora quedo para todo el equipo de vigilancia nuevo de la casa. La habitación de mi madre y su despacho están con llaves, les puso cerradura con clave.

Al sentir que todo estaba en silencio, salí al balcón a tomar aire, me apoye en la baranda mirando el cielo, pidiendo que mis padres aparezcan y que todo esto de una vez termine y dejemos de vivir con miedo. Siento una manos en mis hombros y giro rápidamente haciéndome ver unos ojos verdes, fruncí el ceño y camine hacia otro lado.

-Perdona no te quise asustar, solo vine a darle las buenas noches a Ethan, te vi aquí y quise dártelas también-

-Buenas noches Peter- dije secamente, de verdad me susto.

-No seas así conmigo, así tan fría- vi en su rostro tristeza.

-No lo soy, solo que si alguien nos ve se puede mal interpretar- suavice mi expresión y el también.

-Het verte así tan mujer, hace que todo lo que vivimos se venga a mi mente-

-No es momento de hablar de eso- dije tratando de ir a mi habitación, pero me atrapo en sus brazos camino hasta dejarme entre la baranda y su tonificado cuerpo.

-Puedo ver en tus ojos que aun te pasan cosas conmigo- respire profundo y me perdí en su mirada.

¡No Heather ahora no!

-Me tengo que ir-

-No te dejare ir como la última vez que te tuve así para mí- ¡Lo había olvidado!

-Pet por favor no hagas esto más dific...- no puede terminar porque ya me tenía presa en sus labios.

Comenzó con pequeños movimientos, apreté mis ojos con fuerza, no debería estar haciendo esto ¿Por qué lo hizo?, apretó más su agarre en mis caderas, deje mis manos tomaras posesión de su cuello y acaricie su cabello como siempre me encantaba hacerlo. Le di entrada a mi boca y me comencé a mover al ritmo de sus labios, suavice mis ojos aun sin abrirlos, sentí su nariz rosando la mía hace que mil cosas pasen por mi cabeza. Comenzó a bajar sus manos, tocando cada parte de mi cuerpo, en ese momento recuerdos aun no superados vinieron a mi mente, el aire de mis pulmones se extinguió y lo empuje con todas mis fuerzas. Comencé a respirar rápidamente, al abrir mis ojos lo vi atónito.

-Necesito que te vayas ahora y que no vuelvas a hacer eso- dije casi gritando.

-Het perdóname no fue mi intención- se intentó acercar a mí y camine hacia atrás.

-¡QUE TE VAYAS!- grite, ya me estaba exaltando.

Salió sin decir nada. Corrí hasta el baño y caí detrás de la puerta. Me puse en posición fetal, que me tocara de esa manera me hizo recordar todo lo que ese hijo de puta hizo en mí.

Nunca fuiste un error #NFUE1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora