Kilómetros [En pausa y en edición]

Ausencia

Charlotte, Charlotte, Charlotte...
Los labios de Cameron pronunciaron el nombre de la chica tres veces seguidas; recordó haberla agregado al facebook por sugerencia de alguien.
Alexander y Cameron eran amigos, vecinos, y también hermanos desde los cuatro años, compartían casi una vida entera, Alex se la pasaba diciéndole a Cam que debía buscar una chica, él se negaba. Había tenido algunas relaciones pero siempre terminaban aburriéndolo, era lo mismo una y otra vez: escenas de celos, engaños, peleas, discusiones en cualquier parte, en fin, se cansó de que las chicas fueran tan materiales que mejor decidió dejar de buscar y concentrarse en nada más que él y su futuro. Sin embargo, siempre estaba Alex mandándole como sugerencia a miles de chicas que por obvias razones él rechazaba. Maldita sea quien haya creado esa opción.
No importaba el día y menos la hora. Su amigo estaba loco, más que él.

-¿Por qué rechazaste a Mila? Era muy bonita.
-Bonita y muy plástica. Apuesto a que edita su foto con photoshop, o se pone todo el maquillaje de su madre en la cara para rebajarse seis años. Caray, Alex. ¿Dónde las encuentras?
Alexander rió con ganas, cada vez que reía, alguna chica lo miraba, su risa era hermosa y contagiosa. Más que la de Cam.
-Creí que te gustaban así, hermano.
-Deja de jugar, seré un hombre de negocios.
-Te veo siendo seducido por tu secretaria como en las películas.
Cameron le dio un golpe en el hombro.
-Ya, sé que es tu fantasía, pero no la mía. El día que le atines a algo, te regalaré veinte dólares.
-Trato hecho.

Un día, después de pasar a una cafetería por un delicioso chocolate para el frío, Cameron encontró otra sugerencia y dos mensajes de su amigo. Nada de coincidencias, todo a propósito.

Alexander Adams
Hermano, encontré una. Es todo lo contrario a lo que siempre te sugiero, deberías pensártelo dos veces.
Espera... ¡Es amante de Star Wars!

¡Por Cupido!, exclamó Cameron. Le había advertido dos días antes sobre lo cansado que estaba respecto a ese tema y ahí estaba de nuevo, insistiendo. Perezosamente, dio un click a la sugerencia y luego a la biografía de la chica. En ese momento juró que no retaría a Alex en su vida.
La imagen de perfil de aquella chica era hermosa, más bien ella lo era. Tenía el cabello rojo, tanto como el fuego, ojos cafés claros, labios definidos de un tono rosa, mejillas sonrojadas y una sonrisa dulce; y lo más importante, no tenía filtro, se veía demasiado natural y cálida.
La miró por un minuto, los segundos pasaron lentamente y cuando por fin reaccionó, hizo click en la opción: Agregar como amigo.

Cameron es un chico que cree en el destino, sabe que todo pasa por algo en la vida y ahora Lottie es parte de su destino por una razón: ella le hacía falta y no se había dado cuenta hasta que la tuvo enfrente. Porque claro, ¿cómo te das cuenta que necesitas a alguien que no conoces?
Maldijo, le debía veinte dólares a Alex, agradeció que desde ese día él se fue de viaje, de lo contrario le estaría cobrando.

Cameron Duncan
Chaaaaaaaaaaar, hoy es jueves. ¿Mucha tarea? Ayer solo estuviste un rato al igual que el martes.
¿ME ESTÁS IGNORANDO?

Se dispuso a hacer sus deberes, escuchó música, discutió con su padre, hizo mil cosas pero nunca hubo respuesta por parte de la chica del otro lado del mundo.

VIERNES

Las clases para Cam fueron eternas, tanto que si lo comparaba con el infinito, quizás quedaba corto. Vale, exageraba pero casi era así. Ni hablar de cuando llegó a casa.

SÁBADO

Odiaba mucho los fines de semana antes del examen para el lunes. Él hacía y ponía mil pretextos para estar ocupado, así no tendría que sentarse a estudiar. Charlotte lo hubiese regañado.

DOMINGO

De acuerdo, por más que lo intentara, le parecía imposible. O se sentaba a grabarse el libro entero o reprobaba el semestre. Optó por la primera opción, aunque sólo pudo con la mitad, no quiso defraudar a Char.

LUNES

Jodido primer día de exámenes. Jodidos días sin Char.
Al llegar al salón, todas las sillas de atrás estaban ocupadas, junto a las ventanas también y las esquinas de igual manera. A regañadientes, se sentó en medio, donde el profesor tenía la mirada fija.

MARTES

Otro examen, al menos por esa vez, brincó de alegría al ver una silla vacía en la esquina. Le fue de maravilla y no tuvo que copiar. Pero no tuvo a quien contarle su felicidad.

MIÉRCOLES

Dos exámenes, con eso lo describe todo. El primero estuvo tranquilo como Lottie y el segundo fue un caos como él.

JUEVES

¡Viva el inglés! ¡Viva la psicología!
El mejor día de la semana, más cuando tienes una ventana con paisaje. Aún le hacía falta aquella chica.

VIERNES

ÚLTIMO DÍA. ¿Para qué quería más?
Ansiaba hablar con ella.

Sábado y domingo, fin de semana libre, por fin de vacaciones y ella no aparecía. Tenía miedo, no sólo era su amiga, ya era alguien especial. Casi todo el fin de semana estuvo de mal humor y miraba su celular a cada minuto.

Cameron Duncan
Te echo de menos, Char. Mi vida no es tan genial sin ti.
No, no lo es para nada.
Enviado dom a las 20:00

Sin sus mensajes.
Sin sus regaños.
Sin las risas.
Sin el amor apache.
Sin los reclamos.
Sin su ego.
Sin Charlotte, no era él.

¡HOLA MIS LECTORES!
Al fin subí este capítulo. Lamento la tardanza. Los tenía en el borde de la desesperación, bueno, eso espero, sjdkskdks. Bueno, aquí está Cam con ustedes. Este capítulo fue distinto, ya se habrán dado cuenta. Ahora sabemos lo que piensa ese chico de ojos verdes.
Sigo esperando sus comentarios. Sería mi mejor regalo de navidad.
Nos leemos en el siguiente capítulo, el especial de Navidad. :D
Los amo.