Capítulo 17

103 9 0
                                    

Han pasado casi 6 meses desde que lo vi por última vez. Desde el día que lo vi en el hospital, desde que me besó.

Cada día lejos de él es una constante lucha por no morir de dolor y de rabia, no ceso cada noche de preguntarme por que mintió.

Me golpea el alma imaginarlo en brazos de otra mujer, que alguien más lo ama en las noches, que otra mujer toca su cabello y mira sus ojos azules, escucha su voz, su voz grave e hiptonizante.

Cada noche me asomo al balcón del apartamento que alquilé. Me quedó por horas imaginándolo aquí conmigo.

Me pregunto ya con cierto masoquismo si alguna vez me recordó, si le dolí aunque sea un poco. Yo creí que estaríamos siempre juntos, no puedo dejar de amarlo.

Al mirar hacia adentro solo encuentro el vacío, el mismo que llevo adentro, aunque creo que dentro solo tengo trozos rotos y recuerdos amargos.

-Aquí estas Aria, llevo rato buscándote aunque siempre te encuentro en el mismo lugar- Dijo Jhon, con mucha ternura.
Suspire, tratando de borrar la tristeza de mi rostro.

-¿Que has estado haciendo?, ayer te vi muy metido en el computador, ¿Va todo bien con la empresa?- Pregunté intentando aniquilar a Daryl de mi cabeza como tantas veces he debido hacerlo.

-Todo va bien, pero estamos a las puertas de cerrar una negociación demasiado importante, creo que debemos regresar Aria, desde acá no voy a poder manejarlo y no quiero dejarte sola de nuevo- Las palabras de Jhon estaban cargadas de sinceridad y trataba de ser muy cariñosa, había cambiado mucho desde que vinimos a Milán.

Pero sus palabras me dieron un vuelco al corazón. Regresar era algo que se suponía no debía pasar, no tan pronto.

Lo miré sin pronunciar palabra y tratando de no mostrar ninguna emoción. Tomé aire, asentí con la cabeza.

-¿Para cuando sería eso?- Le pregunté con el corazón en la mano, le di la espalda para que no notara que mis ojos se llenaban de lágrimas, ya no podría huirle mas a mi realidad.

-En una semana, amor sé que debí decírtelo antes, pero si no lo hice fue porque hasta último momento traté de aplazarlo y evitarlo, pero la verdad es que necesito volver y encargarme de los asuntos de la empresa.

Además allá está Delia, tus hermanas, Claudia, y en dos semanas será tu cumpleaños. Ya verás que volver será bueno - Jhon me abrazó, yo fingí una sonrisa.

¿Qué podía decir para evitarlo? En el fondo quería volver, quería verlo y enfrentarlo y preguntarle porque me hizo tanto daño.

Quería ver a Daryl a los ojos y entender que era un mentiroso. Quizás así hallaría paz, y ya no me dolería más.

Esa semana pasó sorprendentemente rápido, en cuanto menos lo pensé estaba frente a la ventana del avión. Regresaba a casa, a la mansión Richardson.

Al llegar me recibió mi mamá, mis hermanas y Claudia. Todo parecía volver a la normalidad como si nada hubiese pasado.

Los días transcurrieron y todos se preocupaban por los preparativos para mi cumpleaños. Jhon insistía que debía ser por todo lo alto, y yo quise complacerlo con eso. Él se había esforzado mucho por reconstruir lo nuestro, era mejor esposo que nunca y trataba de hacerme feliz.

Tres días antes de la fiesta, escuché pasos que iban y volvían en la sala, parecía haber movimiento de mucha gente, así que me puse mi bata y baje a ver que sucedía. Mi madre, Claudia y Jhon, estaban junto a algunos empleados tratando de colocar en algún sitio un cuadro muy grande.

-Que bueno que te despertaste, esto llegó para ti. Es un regalo que envían de la galería de arte. Trae una nota-.Dijo mi madre y me entrego un sobre con una tarjeta pequeña sin firma.

Secretos en las sombras »TWD«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora