Cómo es que en nuestra vida nos cruzamos con tantas vidas y que a la mayoría no llegamos a conocer realmente. Cómo sería si con cada persona que cruzas mirada en la calle te pusieras a hablar.
Yo personalmente quizás podría estar hablando por horas y horas. Podría contarle cómo es mi vida. Con cuantos infiernos me quemé y con cuantos cielos me salvé. Podría contarle como dejó ir a las personas importantes y cómo me cuesta a veces dejar ir a la gente que apenas conozco.
Podría contarle todo lo que me llevo a hoy ser así, que soy demasiado confiada y que quiero y amo con facilidad. Y que así de fácil también perdono.
Y ellos podrían hablarme horas y horas de su vida, de sus problemas y juro que no me cansaría. Le prestaría atención a cada detalle de todo lo que quiera contarme.
Y luego simplemente le diría adiós.
