El comienzo de un recuerdo

Era el primer día de clases, tenía tanta flojera para levantarme. Me senté en la orilla de mi cama, metí los pies fríos en mis pantuflas moradas, prendí la lámpara tuve que cerrar ligeramente mis ojos grisáceos por tanta luz que emitía el foco. Fui a mi closet elegí una blusa azul oscuro con unos jeans grises y unos flats de mezclilla. Perfecto para el primer día. Baje las escaleras de mi casa agarrando él barandal de madera. Fui directo hacia la cocina. Me senté en la silla de la esquina, a lado estaba su hermana pequeña Charlotte. Ella era de cabello negro y ojos verdes profundo. Iba con una blusa de cuadros roja, unos jeans despintados y unos botas café claro.
El desayuno fueron unos waffles con miel de maple, deliciosos cuándo los prepara mamá. Comencé a comer demasiado rápido, están hambrienta ya que ayer no había cenado. Mi hermana desayuno un poco más despacio porque entra más tarde. Una vez acabando salí de casa, papá se ofreció a llevarme pero me negué y preferí ir caminando. A unas cuantas casas vive mi amiga Sofí , siempre desde que era pequeña caminábamos juntas hasta que llegábamos a la escuela y nos íbamos a nuestras clases. Hoy no sería un día diferente al resto, escuela, platicar, comer, deberes, dormir. Mi vida no era nada interesante, rara vez sucedía algo emocionante.
En cuanto llegue a la escuela salude Sally, Sam y Eduardo. El era mi crush, claro Sofía y Sally eran las única que sabían, no me iba a arriesgar a que se enterase y arruinar nuestra bella amistad.
Mi primera clase fue matemáticas. Nos pidieron presentarnos como cada año del primer día. La ventaja de eso es que esos días no haces nada más que intentar socializar con alguien nuevo. Yo rara vez logro eso. Voy en tercer grado así que en la siguiente hora perdimos francés ya que nos llevaron a dar una vuelta por prepa. No me quería separar mucho del grupo porque una vez que era pequeña me pidieron que le entregará unos papeles a un profesor. Entre tanto salón me perdí y me encontré con Eduardo, el me acompaño con el profesor. Gracias a eso me hice su amiga aparte sin el tal vez seguiría ahí. Seguí caminando perdida en mis pensamientos...
-Agh!!
-Perdón- dije avergonzada, me aleje de ellos. Dos chavo de segundo de prepa, a ninguno de ellos lo había visto antes. Contra el que me estrelle tenía un cabello rubio oscuro, usaba lentes a través de ellos pude ver unos ojos no sabía si eran café oscuros o verdes. Unos ojos me confundían con tan solo mirarlos. El otro era moreno con un cabello castaño y unos ojos igual que su cabello.
-No me fije lo siento-contesto un poco apenado, algo que me sorprendió
-¿Cómo te llamas? Yo Miguel-dijo el otro chico
Sorprendida tartamudee y conteste- Luna- de la nada llego Sofi. En cuánto miro a Miguel note una chispa en sus ojos.
-Yo Víctor-Contesto el de lentes. En ese momento sonó la campana, nos tocaba clase de inglés
-Nos vemos luego- dije
Sofía y yo caminamos en silencio hasta que dijo
-No se te hizo guapo Miguel. Aw era tan adorable con su ojos parecidos a los míos.
-Jajaja ya empezaste con tus curserias
-Ay tu siempre estas hablando así de Eduardo-dijo aunque eso era cierto hablaba muchísimo de el y a veces hasta repetía lo que ya había dicho
-Bueno pero si quiera lo conozco desde más tiempo
Seguimos caminando en silencio hasta que llegamos al salón. Vi a Eduardo sentado al final de la esquina. El tenía cabello rubio y cuando no se echaba tel se le paraba todo, sus ojos eran café claro un poco verdoso. Decidí ir  a sentar a lado de el ya que estaba vacía la silla de alado. Al entrar la maestra el salón entero enmudeció  detrás de ella venía el director con alumnos atrás. Como todos los años el director pasaba a cada salón presentando a todos los nuevos porque quería que hubiera amistad entre todos los alumnos, algo que jamás se había logrado.