Eléctrico Amor

El Club

Los del Club.

Renata

No sé qué ha pasado, creí que le gustaba, pero ¿cómo puedo si quiera pensarlo? Un hombre de su tipo interesado en alguien con una vida tan aburrida, él es todo aventura y adrenalina y yo soy... bueno, soy esas historias que él vive pero detrás de las páginas de un libro. Por un segundo pensé que me besaría pero no hizo más que besar mi mano y salir corriendo de aquí.

-Está bien, no pasa nada me digo a mi misma, no es para tanto, puede que esté muy acostumbrada a ser yo la que actúa raro y bahhh... Mi móvil suena y es Izy, intento que no note mi decepción pero es que la telepatía entre esta mujer y yo es tonta, ella sabe que es decepción sentimental aunque ni sepa de donde viene, _No me pide explicaciones pero sea lo que sea ella ya decidió que el tipo seguro es un imbécil.

Termino la llamada con Izy y las cosas se ven mejor ahora, ella siempre lo logra, quedamos en ir a tomar algo mañana después de mi cita en la editorial y me tomo la pastilla de Morfeo por que hoy menos que nunca lograre dormir por mi cuenta.

Suena el despertador y sorpresa para mí, mi mal humor de las mañas el que ya no tenía más, pues decidió regresar y con todas sus ganas de fastidiarme la vida, me levanto a regañadientes solo porque no me queda otra opción, y si admito algo de depresión hay en esto de los medicamentos para dormir y en las mañanas de malas, pero pues después de mi separación con el padre de Rodri las cosas no son fáciles, no sé cómo mi madre ha soportado tantos años con todo en su cabeza, preocupándose por sus hijos y su vida personal, ahora también por mi estado depresivo que llevo en silencio pero que ella conoce muy bien, creo que la mujer es un milagro aunque no creo mucho en nada religioso, pero definitivamente soy una persona espiritual y sé que ella no es una mortal, yo apenas y salí de mis crisis de ansiedad y ella es un roble.

Me doy una ducha rápida, me disfrazo de persona seria, confirmo mi cita con Gloria mi jefa directa y me despido de mis amores, mi madre sabe que mi café con Izy se volverá cena así que no hace falta que lo diga.

Llego a la editorial y todos saludan cariñosos, a esta tribu de locos los veo casi que cada vez que Gloria se emociona con algo y eso pasa cada ... veamooosss,,, 1,2 ,3, nunca, así que ya los extrañaba.

-Hola Lau ¿cómo vas? Le digo a la recepcionista y secretaria de Gloria, ella es una chica de 1.53cm y de cabello hasta la cintura, negro como sus ojos, es muy simpática y siempre tan viva, la editorial esta parada gracias a su trabajo.

La veo detrás de 4 torres de papeles y mientras contesta las 3 líneas al mismo tiempo se toma un momento y me sonríe.

-Reny, Preciosa pero tú... ¿qué pasa que vienes 30 min antes de tu cita? ¿Qué? ¿ tanto nos extrañas?

-La verdad si, quería aprovechar a repartir besos y abrazos y luego pues ponerme en el papel de profesional jajaja. Ella sabe que Gloria nos pone imagen de personas serias pero todos los de esta empresa tenemos los tornillos flojos y de tanta historia que leemos ya no tenemos una propia.

-Pues pasa, pasa que les he avisado a todos que vienes y ya te esperan en la cafetería.

-Gracias Lau preciosa te veo luego.. Llego a la cafetería y después de sentir el ánimo por los suelos se asoma a mi cara media sonrisa, de aquí soy, hay 5 espacios con mesas pequeñas y dos sillas cómodas para cada mesa, solo 3 de ella están ocupadas entre ellas el Club de mis loquillos amigos y todos en este lugar tienen un libro en mano. No sé cómo hay personas a las que no les agrada leer, en serio creo que es porque no han encontrado aún un género literario del cual se enamoren. Me acerco a la mesa y nadie se percata de mi presencia, veo las caras de todos tan sumergidos en sus libros.