Déjame morir.(L.M)

Capítulo veinte: El gran día.

PDV Daniela
Sí, estaba recuperada casi en su totalidad, se puede decir que en un noventa y nueve porciento, pero a veces siento que mi enfermedad vuelve para quedarse con todo, con Lionel, con mi vida, con mi mamá. La anorexia me acompaño durante toda mi adolescencia, aprendi a lidiar con ella, y ahora que no está no tengo nada. Me siento vacía, a veces me provoco el vómito sin que Lionel se entere, él es todo lo que tengo, pero mis demonios son más fuertes.
Me alejo de mis pensamientos cuando escucho vibrar mi celular, me fijo quién es.
5 Mensajes de Kun bebo.
Eu enana, Leo te quiere decir algo jiji.
Si tienen un hijo va a salir un minion.
Era un chiste igual
Me contestás
Es importante
Respondo
Dani
Y si tenés un hijo con Karina va a salir gordo
Ahre te amo
Que quiere
Kun bebo
Mandale un mensaje a él
Visto a las 3:24
*Mensajes con Leo bebu*
Dani
Que querés mi amor

Leo bebu
Nada por?

Dani
Dale tonto, Sergio me dijo que me querías decir algo.

Leo bebu
Ah sisi, mañana nos vemos en tu casa y te digo.
****
No estaba segura de si quería verlo, sentía que le estaba mintiendo, sentía que me reía en su cara y que no me quería recuperar.
Me levanté de la cama y fuí directo a la cocina, había mucha comida, agarré todo lo que pude y me atraqué, acto seguido fuí al baño a vomitar, me quedé tirada en el piso llorando, nunca iba a poder salir de esto. En los últimos meses me hice una amiga por twitter, me pasó su número y ahora hablamos todos los días, Fátima es la única que me entiende todo y a la que le puedo contar sea lo que sea. Ariadna sigue siendo mi amiga, pero no como antes, se cansó de mi anorexia y la entiendo, hasta yo me cansé.
La llamé.
Un tono, dos, tres, atiende.
-¿Hola?-Dice confundida.
-Te necesito.-Le digo con la voz quebrada.
-¿Qué pasó? ¿Estás bien?
-No, te juro que no aguanto más, estos meses estuve bien, pero me dí cuenta que volvió.-Sollocé.
-¿Eh? ¿Quién volvió?
-Mis problemas.
***
Me desperté tirada en el baño, escucho que golpean la puerta.
-¿Quién es?
-Yo Dani.-Dice Lionel.
Me peino rápido y abro la puerta.
Cuando entra me mira de arriba hacia abajo. Mierda mierda mierda.
-¿Pasó algo?- Pregunta.
-No, no ¿Por?
-Estás rara.
-No dormí bien.- Respondo esquivando su preocupación.
-Bueno, ¿Desayunamos? Traje facturas.
Mierda.
-Bueno, no tengo hambre igual.
Me mira.
Empezamos a comer mientras yo tomaba un té y él un capuccino, comí tres facturas con pastelera, haciendo cuentas de calorías, aproximadamente mil. Tomé el té con edulcorante, eso serían más o menos unas 40 calorías. Demasiado para solo haber empezado el día.
Lionel me hablaba pero yo sólo pensaba en la grasa que se me iba a acumular si dejaba todo ese alimento dentro de mí.
De repente siento mi mejilla mojada, me agarro la cara y apoyo mis brazos sobre la mesa, llorando. Él no entiende nada y se limita a abrazarme, me pregunta que me pasa pero yo solo pienso en vomitar.
Corrí al baño, cerré la puerte y devolví todo lo que había comido. Leo del otro lado de la puerta me pregunta qué me pasa. Escucho como se sienta contra la puerta.

-Pensé que te habías curado.-Suelta el 10.
-Yo también.-
Al chico se le llenan los ojos de lágrimas y ella lo siente.
-Dani, yo quiero que estemos bien. Hoy vine a hacerte una propuesta.
-Yo no puedo estar bien.
-Sí que podés, todos podemos.-Dijo Lionel.
Se quedaron en silencio.
-¿Qué me querías decir?
-Salí del baño que te cuento.- Condiciona el mejor del mundo.
-No, no quiero salir, me da vergüenza.
-Dale salí, sos hermosa igual.
Daniela sale con los ojos rojos y el pelo desordenado.
-Pasado mañana vamos a Estados Unidos por la Copa América. Te quería pedir si me acompañas, quiero que lo nuestro sea más visible.
-Yo quiero, pero...
-Sin peros. ¿Sí o no? Después de la copa quiero que vivamos juntos.
****
Saludos Mar.