LA APUESTA (Ross Lynch) [EDITANDO]

Fin: ¡El dueño mad exdaño de todod!

Agradecimientos a: DarkCupcakesLove

Ya había pasado casi un mes después de lo sucedido. Ya no hablaba con nadie mas que con mis amigas, John, Roy y Sam me dedicaban miradas de tristeza aunque me sonreían. A Nat simplemente lo evitaba y en un principio intentó hablarme pero lo ignoré, logrando que se rindiera. Y Ross, él había dejado de ir al colegio desde la semana pasada. Ya no me importaba.

Todo iba mejorando. O eso esperaba. Ya no me sentía tan mal, ya había pasado por pa negación, el odio, la melancolía, la vergüenza, la indignación, etc ... Ahora estaba en la etapa de "Superación". A pesar de que días después hubo rumores en la escuela de Alex decidió esparcir ...

Quería mejorar y dejar todo atrás y lo estaba consiguiendo. Había vuelto a tener la misma inspiración que tenía a inicios de año. Volvía a sentir. Ya no dejaba de pintar. Mi cuarto estaba repleto de pinturas.

Ahora. Mi hermano Joe me llevaba en su auto en dirección a la escuela. En la parte de atrás llevaba un lienzo envuelto y perfectamente cubierto, para evitar desastres.

- ¿Cómo estas?- pregunto poniendo su mano encima de la mía.

- Mejor.- lo mire y le sonreí, por lo que él asintió alegre.

- Si los veo, a cualquiera de los dos, los golpeare.- mencionó, por lo que reí.

Me despedí de mi hermano y salí de su auto. Tome mis cosas y me dirigía a la entrada donde estaban Amanda y Luz.

Me acerque s ellas y las salude con alegría.

Pronto ellas miraron a la entrada de la escuela y quedaron atónitas por lo que voltee a ver a aquella dirección.

Ross, ahí estaba parado frente a mi. Estaba sudando y tenía las manos temblorosas.

- ¡ZOE!- gritó como si estuviera a mil metros de distancia.

- ¡Déjame Ross!- exclamé.

- Sé que me quieres y sé que yo a ti.- dijo ignorando lo que anteriormente mencioné.

- Ya déjame Ross ...- suspiré exasperada. Él se acercó hasta donde yo estaba, estaba muy cerca.

- ¡Déjame demostrártelo!- gritó. Todos nos miraban, caminaban en el pasillo pero cada persona que pasaba nos miraba, él me tenía sujeta de la muñeca.- Bésame una vez más.

- ¿Qué?- pregunte atónita, no podía mirarlo, aún estaba furiosa.

- Bésame otra vez, dije.- Impuso él.- Zoe, al menos mírame.- ignore lo ultimo.

- ¿Que te hace pensar que yo voy a besarte?- pregunte aun sin mirarlo.

- Porque estoy tan seguro de que tu sientes algo por mi y lo sabes perfectamente. Solo te dedicas a negarlo.- dijo seguro.

- Jamás lo eh negado.- dije casi inaudible.

- ¿Entonces que tienes que perder?

- Perdería mi dignidad, tal vez perdí parte de mi orgullo y dignidad porque jamás me di cuenta de que me gustaba uno de los jugadores en la apuesta de "quien besa primero a Zoe". Pero no volveré a caer dos veces en el mismo lugar.

- Tienes razón, yo también gane una apuesta relacionada contigo.- todo se quedo en silencio, él aún no me soltaba y yo no podía seguir luchando contra su fuerza.- Es mas, ahora que recuerdo, yo gane dos apuestas que tiene que ver contigo. Y sé que si aclaráramos eso frente a todos, tu recuperarías tu dignidad y yo perdería una reputación bien construida de años.