"¿Encuentro inesperado?"

1.1K 119 19
                                    

Pov Tomás

Al fin habíamos llegado a la isla junto con Diego. Habíamos estado caminando por horas y los dos comenzamos a debilitarlos. Si bien Diego sabía del tema y se bancaba cualquier cosa, era una persona y también se cansaba.
Llegamos a una de las playas más cercanas de la isla en donde aparentemente estaba poblado, había chozas y luces que se veían al fondo. Comenzamos a caminar hasta llegar a ellas cuando varios ruidos nos distrajeron.
No sabía si era producto de mi imaginación, pero escuchaba la voz de Esperanza, esa voz que ni en un millón de años se me iba a olvidar y me era casi imposible dejar de reconocer.
Me tambalee producto del pequeño mareo que se pronunció ante mi, Diego me miraba totalmente preocupado.

-Estas bien?.-Preguntó casi agarrándome para que no me caiga.

-Si si. Sigamos.-Le pedi y accedio no muy convencido.

Otra vez volvimos a caminar y volvi a escuchar una voz, esa voz.

-Escuchas eso?.-Le pregunte a Diego que me miró sin entender.-Esa. Esa voz, la escuchas?.

-No, no escucho nada.-Diego finalizó y entendí que era producto de mi imaginación por mis terribles ganas de encontrar a mi mujer.

El camino era largo y tendríamos que empezar a buscar a ver si encontrábamos a alguien, alguna persona que pudiera ayudarnos. Que fuese del lugar. Así que decidimos dividirnos y establecer un punto de encuentro en caso de que tuviéramos que reencontrarnos.

-Vamos a hacer esto Tomy, escucha bien porque es peligroso. El lugar es grande y hay que dividirnos. Yo voy a buscar por un lado y vos por el otro.-Diego me comentó y asenti.

-Bien, hay que establecer un lugar, un punto de encuentro.

-Si, mira, vez ese árbol rojo? Parece ser único en el lugar así que si nos perdemos y tenemos que encontrarnos por algo ese árbol rojo va a ser el punto de encuentro y otra cosa más, los dos tenemos nuestros celulares y si bien no tenemos señal y no podemos llamarnos, los dos tenemos algún sonido o linterna en ellos. Así que si encontrado algo, volver al arbol rojo y busca algún sonido en tu celular y levanta la linterna y yo vuelvo, y viceversa.-Diego volvió a decir y entendí s la perfección, nos abrazamos en forma de saludo y ambos partimos por nuestros caminos.

Ya me encontraba sólo y aunque eso no me aterraba, si me daba miedo volver a escuchar esa voz tan particular.
Volví a caminar mirando cada lugar con detenimiento, buscando a alguien que pudiera ayudarme.
Con sólo pensar que mi mujer podía estar ahí en peligro me agarraba una sensación horrible en todo mi cuerpo, y de pronto, otra vez esa voz apareció pero esta vez con imagen incluida, y si, estaba viendo o.imaginando a Esperanza. Estaba loco, era preso de mi mismo. Un fuego interno me recorrió entero, me comencé a sentir mal, un mareo más profundo me invadió y creó haberme caído al piso pero choque con alguien que estaba de espaldas, ese reflejo de Esperanza que me estaba persiguiendo.

Me recompuse aunque aún me sentía a mal y al chocar con aquella persona no podía creerlo.

-Emma, donde te habías metido?.-Pronunció antes de darse vuelta y quedar frente a mi.

Me quede inmóvil, ambos lo hicimos, no tenía tiempo de reacción, y crei no tenerlo jamás. No podía creerlo.
Me sentía como nunca y raro, la había encontrado, mi mujer por fin estaba en mis brazos.
Cai en la realidad cuando ella se quedó mirándome fijamente sin poder creerlo y de un segundo a otro note como su respiración se iba acelerando y como se tambaleaba, la agarre entre mis brazos y al instante se desmayo.

Pov Esperanza

Desperté lentamente, me dolía la cabeza y la confusión que tenía era enorme. Deseaba que lo que había pasado antes de mi desmayo fuera cierto pero lo creía imposible y hasta esperaba que la persona que estuviera a mi lado fuera Emma. Me movi despacio y mire a mi alrededor, estaba acostada en la arena con el canasto lleno de flores que había recogido y supe que todo lo anterior había sido un sueño, que Tomás no me había encontrado y que tampoco lo haria. Me encontraba sola en el lugar, era hora de volver a casa, aún no sabía donde estaba Emma pero estaba segura de que cuando regresara iba a estar muriendo de miedo.

Me levante rápidamente y acomode mi ropa, sacudí gran parte de la arena que tenía en ella y respire profundo varias veces y cuando me dispuse a volver a caminar, esa voz apareció de nuevo.

-Hey chiquita.-La voz de Tomás se presentó de nuevo y gire para darme vuelta. Otra vez el.

-Dios, esto tiene que ser un chiste, me estoy volviendo loca. No sólo que escuchó su voz, si no que también lo veo. Diosito ayudame.-Dije en voz alta tratando de volver a la normalidad pero una risa, esa risa, la que me enamoró y la que hacia tiempo no escuchaba inundo el.ambiente dejandome totalmente muda.

-Yo también crei que estaba loco, escuchaba tu voz por todas partes y hasta te veía, pero eras vos mi amor, te encontré.-Volví a escuchar y me acerque hasta Tomás o mi imaginación, lo que fuera.

-Tomás?.-Dije con los ojos llenos de lágrimas, me acerque hasta el hasta quedar frente a frente, pase mi mano por su mejilla, acaricie su barba, su pelo, toque su mano y todo era muy real, demasiado real para ser mi imaginación.

Ante cada caricia mía, el cerro los ojos y sonrio. Era muy real.
Mis ojos se llenaron de lágrimas y una sensación de paz, de esa que había dejado de tener hacia mucho tiempo, me inundó por completo.
Sólo lo abrace y no omiti sonido, únicamente el de mi llanto. Lo abrace como jamás había abrazado a alguien, necesitaba sentir que era verdad y que estaba en sus brazos que por fin me había encontrado. El también me abrazó, un abrazo que nos desarmó a los dos físicamente y que junto nuestras partes rotas del alma, un abrazo que necesitaba hacia tiempo.

Tomás hizo el intento de separarse por un momento pero no lo deje, no quería que me soltara, nunca más.

-No, no me sueltes. No me dejes.-Le pedí en tomó de suplica todavía sin poder creerlo.

-No mi amor no, ahora que te encontré no te suelto nunca mas, nunca más me separó de vos mi amor.-El me respondió y me abrazo más fuerte.

Esta vez fui yo quien rompió con el abrazo para mirarlo a los ojos, esos ojos que extrañaba más que nunca.

-Te amo mi amor, te amo. No sabes todo lo que pase acá y todo lo que te extrañe, 9 meses sin vos.-Lo mire a los ojos y el al igual que yo también estaba llorando pero se mantenía fuerte.

-Y yo mi amor? No sabes todo lo que yo pase sin vos, casi muero. Siento que paso una vida sin vos pero ahora que te encontré no te dejó nunca más.-Tomás volvió a abrazarme pero me separe y volvi a besar esos labios que tanto extrañaba y que tanta falta me hacían. Por fin estaba en los brazos de la persona que más amaba, por fin estaba protegida.

Buenaaaas. SI SI SI, SE ENCONTRARONNNN. Ahora esperó los comentarios diciéndome que me aman ahre.
El próximo capítulo va a estar bueno, y se van a contar todo lo que vivieron sin el otro, falta poco para el final.

Un amor casi imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora