Un amor casi imposible

¿Embarazo?

Pov Esperanza

Desperté entre 4 paredes blancas, me sentía cansada como si no hubiese dormido por días, mi cabeza estaba a punto de estallar, mis ojos seguían sin poder ver por completo, horrible.
Una mano me agarro y pude escuchar su voz.

-Mi amor despertaste.-Tomás se notaba preocupado, con su voz ronca y entrecortada como si hubiese estado llorando.

-Que... Que paso?.-Intente recordar como había llegado hasta ese hospital pero no logre hacerlo. Sólo recorde que me desmaye y nada más.

-Te desmayaste. Que sentís, te duele algo? Te juró que me asuste como nunca, si te pasaba algo me moria.-Tomás volvió a decir preocupado y esta vez un poco alterado, una lágrima recorrió su mejilla y apreté su mano para que no me soltara.

-Me duele un poco la cabeza nada más y estoy un poco cansada, pero Tomás no digas eso por favor. Yo no me voy a ir, no me va a pasar nada y no voy a dejarte nunca.-Trate de decir como pude, no tenía muchas fuerzas para hablar.

-Voy a llamar al médico, espera un minuto. Ahora regreso te prometo.-Asentí aunque no quería que el se alejara, salió por la puerta y sólo tardó segundos que volvió a ingresar pero acompañado de un médico.

-Bien señorita, usted esta aquí por un desmayo, hicimos los estudios correspondientes pero nada malo apareció, el desmayo se pudo haber producido por muchas cosas, quizás estrés u otras cosas. Vamos a dejarla una horas en observación y luego le vamos a dar el alta.-Asentí y vi desaparecer a al médico mientras que Tomás se paraba a cerrar la puerta.

Me dieron el alta a eso del mediodía y yo sólo pensaba en que hoy tenía que volver a Buenos aires.
Me sentía débil aún, mi cabeza me seguís doliendo aunque me habían dando calmantes y los constantes mareos aún seguían presentes. Supuse que no me iba a curar se un día para el otro de ese "estrés" que tenía según el médico.

-Mi amor nuestro vuelo sale a la noche, porque no vas a descansar y yo preparo de comer?.-Tomás me propuso una vez que estuvimos en su casa y accedi. No tenía hambre pero si no comía iba a ser peor.

-No querés que te ayude a preparar la comida?.-Le propuse esta vez yo, no quería estar sola en su habitación mientras el cocinaba, yo quería ayudarlo y entre los dos iba a ser más rápido pero el se negó.

-No Esperanza tenés que descansar, escuchame te desmayaste, estuviste internada y te pasaron un montón de suero y otras cosas como vitaminas. Tenés las defensas bajas y un cansancio extremo, tenés que relajarte, término la comida y la llevó al cuarto para que comamos los dos pero ahora anda a acostarte.-Me beso tiernamente y asenti. Durante toda la noche pude notar su preocupación por mi estado pero yo no estaba enferma, y tampoco creía lo del estrés. Si bien estaba cansada y había vivido situaciones agotadoras, yo soy una persona muy activa y no siento el cansancio en mi cuerpo.

Pov Tomás

Termine de preparar el almuerzo y lo lleve hasta la habitacion en donde Esperanza seguramente se había quedado dormida porque no se escuchaba ni un ruido.
Abrí la puerta lentamente y efectivamente se había dormido, parecía un ángel. Apoye la bandeja en donde llevaba el almuerzo en la mesita de luz y me dispuse a despertarla, en otro momento hubiera decidió dejarla dormir pero ella tenía que comer y más.si estaba débil.

-Ey mi amor, despertate.-Susurre en sus labios mientras ccorria un mechón de pelo que caía en su mejilla.-Vamos mi vida, prepare la comida, tenés que comer.-Volví a pasar mi mano por su suave y cálida mejilla mientras dejaba un beso en la misma.

-Mmm.. Muero de hambre.-Ella me respondió con su voz ronca y de dormida y no pude evitar sonreír.

-Bueno, veni come. Mira lo que prepare, pollo al horno con papas, se que te encanta.-Volví a besar una de sus mejillas mientras ella sonreía ya sentada en la cama pasando una de sus manos por mi barba. Acerque la bandeja hasta ella y comenzamo a comer.