La Chica Rarita

Capítulo 11: No quiero ser ella.

—Crys ¿qué fue lo que paso?—dice Steve preocupado *él no se preocupa por ti se preocupa de que no mates a nadie estúpida*. No otra vez, tú no puedes volver.

—Era una pesadilla—digo algo cabizbaja.

— ¿Hija nos puedes decir que fue lo que soñaste?—dice con ternura y sonriendo algo triste.

—yo estaba en un túnel o un pasillo estaba todo oscuro y se escuchaban murmullos, empecé a correr y cuando llevaba rato corriendo me caí Y luego desperté aquí—digo tratando de esconder el horrible recuerdo.

—Debió ser una pesadilla muy mala—dice preocupada.

—Yo—empiece a llorar—LO LAMENTO—digo para en pesar a correr hacía mi habitación.

Cuando llego a mi habitación sierro con llave y me deslizó por la puerta hasta el piso y me tomo las piernas con fuerza para luego empezar a llorar.

Horas más tarde......

Estaba en mi cama con los brazos cortados e hinchados, solo llevaba un short y un suéter grande color azul oscuro, alguien toca la puerta veo la hora y son las 2:50am quien vendría a las dos de la madrugada, me paro con pereza y cubriendo me los brazos con las mangas del suéter cuando abro me encuentro a Steve, despeinado, con ropa de dormir y con cara de cansancio.

—Hola Crys, ¿te sientes bien?—pregunta un poco preocupado y muy cansado.

—Creo que me he sentido mejor—digo triste y haciendo una mueca de desagrado.

—Oh ¿querrías hablar de eso?—pregunta viéndome triste y la verdad es que se ve sumamente tierno no le puedo decir que no pero tampoco que si ya que mi cuarto esta echo un asco total.

—emm no tranquilo, más bien dime ¿tu como estas? Y ¿por qué has venido a esta hora?—pregunto desviando su pregunta.

—Bueno no muy bien y solo quería ver como estabas-dice sonriendo algo triste—y bueno ya lo hice así que mejor me voy, te dejo descansar...adiós—dice empezando a caminar hacia su cuarto pero algo en mi me dice que no lo deje ir y eso hago.

—Steve...—digo agarrándolo de la mano y deteniéndolo.

— ¿Sí?—pregunta volteándose a verme atento.

—gracias por preocuparte por mí—digo sonriéndole y luego le doy un beso en su mejilla—adiós—digo serrando la puerta viendo como me sonríe.

—adiós Crys—susurra antes de que yo sierre totalmente la puerta y me recargue en ella suspirando como una idiota enamorada.

*¿Vamos en serio crees que él estaría contigo?, que ilusa eres. Solo mírate el no estaría con una chica que se corta y es fea como TU, solo piénsalo solo lo hace porque quiere tener sexo contigo y ya, TU no le importas cariño como no le importas a nadie*.

—cállate y ¿dime que haces aquí de nuevo?, pensé que te habías ido hace tiempo—digo hablándole a ella. Ella es una parte de mi o más bien de la parte oscura de mis poderes, ella lo único que quiere es que me convierta en un monstro, que me convierta en ella.

*oh cariño tu sabes lo que quiero y sabes que tarde o temprano lo tendré, no puedes seguir negando lo que eres. No puedes seguir negando que eres lo que más temes.....YO*. Dice despareciendo de mi campo de visión y sé que lo que ha dicho es verdad aunque me duela, le tengo miedo. Miedo a ser como ella, a convertirme en ella.

Después de estar un rato en el suelo pensando en ella y en cómo no convertirme en ella, decidí que para no ser como ella debía cambiar y para eso debía olvidar el pasado y dejar de cortarme aunque eso era lo más difícil de todo ya que yo jamás había resistido más de tres días sin cortarme y esto iba a ser muy difícil considerando que estoy en una base militar o bueno de agentes especiales y héroes y que aquí ay demasiados objetos filosos, así que en conclusión esto es como estar en un campo minado de bombas solo que lo que tengo que hacer es superar esto en vez de destruirlo o alegarme.

Así que me levante del suelo y fui directo al baño, cuando llegue a este lo primero que hice fue buscar la navaja que había traído conmigo y tirar la al bote de la basura y tomar todas las cosas que tuvieran filo y botarlas a la basura.

Cuando termine ya eran las 6:30 y sabía que debía ir a entrenar y a desayunar, hoy entrenaría con natasha y Clint así que lo más probable es que me enseñen a disparar y a usar armas blancas así que debo estar preparada psicológicamente para ello, luego de eso me ducho y aseo para luego vestirme y vendarme los brazos y como me da un poco de pereza solo me pongo una camiseta de tirantes, unos leggins, unas zapatillas negras y mi pelo recogido en una media cola de caballo.

Cuando estoy terminando de arreglarme tocan la puerta y cuando la abrolo primero que veo es.....

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hola chicas si les gusto el cap voten y no olviden comentar sobre lo que les parece el cap.

y si quieren se pueden pasar por mis otras novelas que tengo en mi perfil y si es haci voten y comenten que tal es parece,les agradesco un monton su apoyo muchas gracias.

y Hasta la próxima ángeles caídos.