Caminando hacia tu Ser Interior.

El sentido terapéutico de la compasión.

A @Aishatsufur por tender el puente, compartir energías y luz.

Cuando iniciamos un camino de búsqueda espiritual debemos saber que estaremos dispuestos a ayudar a otros pero de igual forma estaremos prestos a recibir ayuda. La reciprocidad es necesaria y favorece al que da y al que recibe.
En ese acto de compartir ayuda la compasión se manifiesta porque ella es la forma más pura de amor. Y lo que causa las carencias, heridas, enfermedades, crisis, etc., en el ser humano es la falta de amor.
El hombre que no recibe amor enferma pero igual sucede al que no lo da. Todo lo que está enfermo en el hombre es a causa de falta de amor. Por lo tanto, curar esas heridas y enfermedades del alma depende en gran parte de que demos y recibamos amor.
Pero... ¿por qué la compasión puede ser una terapia?
Pues sencillo, la compasión es la forma más elevada y pura del amor. No es el sexo como pueden pensar algunos. El sexo es una forma de amor que puede ser hermosa y pura, pero es baja pues se produce a nivel físico. La compasión es elevada y se produce a nivel espiritual. El sexo es carne, la compasión es alma.
Con la compasión sencillamente das; ofreces tu energía, tus sentimientos, tus emociones. Si el otro es receptivo estará interpretando tu forma de amarlo, estará permitiendo que entres a su vida. Pero, recíprocamente, tú estarás agradecido de que te haya dejado entrar. Esto es parte de la comunicación que es necesaria para sanar.
Caminar, compartir y continuar. El que compasivamente otorga al otro su tiempo, su amor y su energía ni siquiera espera que le agradezcas. Sólo ofrece y continúa. Tal vez en algún momento tú te detengas y mires cuánto has recibido.
Sólo el amor permite que se de así la magia del intercambio.
Esa es la terapia. Dar amor es la clave.