Dominio de la acción

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Los pensamientos depurados, claros y perfectos pueden convertirse en acción.
Cumplir con
nuestro deber y no con el de los demás, a menos que alguien pida que le ayudemos.
Podemos brindar apoyo cuando sea necesario y cuando se nos pida pero no debemos inmiscuirnos en las vidas de las demás personas. Dejemos que vivan sus aprendizajes y aprendan sus lecciones.
No debemos olvidarnos de cumplir con nuestros deberes ordinarios puesto que al cumplirlos tendremos libertad para prestar otros servicios.
Dominar nuestros actos no es tarea fácil pero si hemos aprendido a dominar la mente y los deseos podremos tener acciones justas y adecuadas.

Caminando hacia tu Ser Interior.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora