Capítulo 75.

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Titulado: Demonios, Lea.

Me desperté, me lave los dientes y la cara y baje a desayunar, luego que desayune y hable con mi papá subi las escaleras para ducharme, me vestí con ropa muy comoda, cogí mi celular, le envíe una foto a Lea donde salía mi panza, luego me tome una foto frente al espejo y la edite para colocarla de perfil. Me llegó un whatsapp, lo abrí y cuando lo ví abri los ojos como platos, era mucha la sorpresa. Era un mensaje de Zayn.

De: Zayn x.

11:09am

—¿Cómo que tengo un hijo?

Demoré en responder.

Para: Zayn x.

11:15am


—No tienes ningún hijo

De: Zayn x.

11:17am

—Lea me dijo que estás embarazada de mi, ¿cómo es eso, __(tn)? ¿estamos embarazados y no me lo dijiste? ¿QUÉ PASA CONTIGO?..

Quería llorar, las lágrimas quemaban en mi garganta.

Para: Zayn x.

11:18am

—No es tuyo.

De: Zayn x.

11:18am

—¿De quién entonces?

Para: Zayn x.

11:19am

—De alguien...

De: Zayn x.

11:19am

—Dímelo.


Dile, dile, dile.

Para: Zayn x.

11:20am

—Bien, es tu hijo, ¿feliz?

De: Zayn x.

11:21am

— ¡Perfecto! ¿Por qué no me lo habías dicho? ¿Tan igual te doy? ¿Qué pensabas?

Para: Zayn x.

11:21am

—No vi la necesidad de que lo supieras, la verdad no te necesito, y él tampoco.

De: Zayn x.

11:22am

—No tomes decisiones por alguien que no puede decir nada

Para: Zayn x.

11:22am

— ¡Demonios, Zayn! ¿Por qué haces las cosas tan difíciles? ¿De verdad te importa tanto?

De: Zayn x.

11:24am

—Simplemente tengo todo el derecho de saber que tengo un hijo ¿No crees?

No sabía que responder, estaba muriendo, literalmente lo hacía, cuantas emociones, podía sentir su ironía y solo eran textos.

Para: Zayn x.

11:30am.

—Tendrás un hijo Zayn, pero no será británico, y no tendrá tu apellido, jamás te conocerá

De: Zayn x.

11:32am

— ¿Dónde estás? Si no me dices le preguntaré a Lea.

Para: Zayn x.

11:33am.

—Pregúntale todo lo que quieras, Zayn. No me importa, tú no eres bienvenido en mi vida, ni en la de Luke.

Y no quise ver más mensajes, así que deje mi celular bajo la almohada, baje las escaleras y vi televisión por horas, cuando no podía aguantar más el hambre me comí un emparedado. Tocaron la puerta, era el cartero, me entregó como 50 cartas, agradecí y le di propina, pobre hombre, empecé a revisar las cartas, cuentas, cuentas, cuentas, cuentas, recibos, pagos, cuentas, una invitación a un baile, recordatorios de reuniones, juntas, invitaciones, todas para papá, las deje sobre la mesa y subí a mi habitación, puse la música a todo volumen y comencé a bailar. Solo esperaba que no llegará la policía.

—¿Escuchas eso, Luke? Se llama música y es de Imagine Dragons, son geniales ¿no? —Hable mientras acariciaba mi vientre—


La hija de la sirvienta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora