La hija de la sirvienta.

Capítulo 77.

Titulado: Las cartas.

Ayer estaba muy feliz, todos me felicitaban ya que cada vez faltaba menos, mi papá me dio su tarjeta de créditos para ir al centro comercial por ropa para Luke, pero me dio pereza y prefiero esperarlo a que llegue así vamos juntos, acabo de almorzar y tengo nauseas, no quiero vomitar, pareceré moribunda si sigo vomitando enflacaré más de lo que debería y Dios con esta enorme panza.

*

Mi papá llegó.

— ¿Fuiste al centro comercial?

—No, estaba esperando que llegaras para que fuéramos juntos

El asintió y se fue a duchar y cambiar.

[...]

Estaba en una tienda donde vendían solo cosas de bebés varones, había tanto para escoger, cogí un carrito de compras, y comencé a ver con mi papá, él escogía conjuntos que eran hermosos, él ya tenía experiencia en esto, todo lo que veía y me gustaba lo echaba en el carrito, mi papá igual, fui a pagar y mi papá salió de la tienda, cuando termine de hacer la fila y pague salí de la tienda. ¿Dónde se habrá metido mi papá? Lo vi cargaba dos latas de pintura, sonreí.

—¡Me has robado la idea! —Sonreí—

—Iré a guardarlas, tú sigue viendo —Dijo, mientras me quitaba las bolsas y se iba para la camioneta—

Entré a otra tienda, habían coches para bebés, carriolas, escogí uno de color blanco con decoraciones en azul celeste, y un dibujo de oso teddy, tenía franjas grises. El precio era elevado pero a mi papá no le importó, así que lo compramos. Y compramos un par de cosas en la tienda.

*

Cuando llegamos a casa, la maletera de la camioneta estaba llena, totalmente llena, comenzamos a bajar bolsas y todo lo que habíamos comprado.

—En el buzón hay correo, ¿podrías ir a revisar?

Asentí.

Fui hasta el buzón, tome las cartas aburridamente las mire, sin revisar. Camine hasta la sala, mi papá estaba en la cocina bebiendo un vaso de agua, fui hasta él y le extendí las cartas.

—Seguro todas son para ti, como la vez pasada —Dije—Espero que hayas pagado las cuentas, y los recibos y todo lo que tenías

—Lo pague ayer, tranquila por eso —Me voltee para irme: —No creo que esto sea mío.

Mi padre me extendía dos cartas, una era de color rosa fuerte, y la otra era simplemente blanca.

—Mías tampoco, iré a ducharme.

Sin más me metí a mi habitación y me duche.

*

—Estás cartas son tuyas —Dijo mi papá entrando a mi habitación—No sé por qué no las revisaste —Dijo y me las tiro en la cama—Voy a salir a una junta


Asentí.

Tenía hambre, cogí las dos cartas, y baje las escaleras, el portazo que le dio mi papá a la puerta me asustó, cogí un paquete de palomitas del microondas y lo eche en el microondas, cuando estuvo lista las eche en una taza y cogí la carta blanca, la otra la dejé sobre la barra de desayuno, me senté en el sillón de mi papá.

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De: Bruno Thompson.
Para: ____(Tn) Lake.

¡Hola! ¡Hola! Tiempo sin saber de ti, sabes lamento lo que pasó aquella vez en el baño, la verdad no sé ni cómo pasó, lo siento de verdad, quiero dejarte en claro que puedes contar conmigo para lo que sea, en fin ¿cómo te va en tu embarazado? ¿Cómo te va con Luke? Espero que muy bien. ¿Ya encontraste a su nuevo padre? (Estoy riendo en este momento). Mucha suerte rora.