Narra Naruto
El agua azotaba mi rostro con dureza, la lluvia me alcanzó hace 4 calles y cada vez era más abundante. A este paso llegaré al Clan Hyuga con las ropas empapadas. Corría con todas mis fuerzas, tenía que resolver todo este lío. Y la primera cosa que tenía que hacer, era disculparme con Hinata.
Me detuve exhausto frente a la casa color marrón. Toqué el timbre.
La puerta se abrió con detenimiento, dejando a la vista un rostro lloroso. Mierda.
—Hinata—Hablé con sutileza.
Ella llevaba un bonito vestido color azul. Se veía que puso esmero en su presentación, lo cual me hizo sentir sumamente miserable. Como pude hacerle esto a una chica como ella. Haberla dejado plantada. Soy un idiota.
—Na-Naruto-kun—Musitó tratando de sonar calmada—. Te tardaste...
Metí las manos a los bolsillos de mi pantalón.
—Lo siento—Dije con sinceridad mirando al suelo—. Yo. La verdad es que. Estoy muy apenado. Me gustaría darte una explicación.
Ella recargó su palma en mi hombro.
—Tranquilo Naruto-kun. Sí quieres puedes pasar, estas mojándote ahí afuera.
—Buena idea—esbocé una sonrisa.
Ella entró en la casa y yo la seguí por detrás. Cerré la puerta.
—Iré a traerte una toalla—mencionó con dulzura.
Me quedé callado.
El interior del Clan Hyuga tenía un estilo vagamente rústico. Los muebles eran en su mayoría hechos de madera. Iluminado principalmente por viejas lámparas de pedestal, otorgándole una escasa luz al recinto. Las paredes oscuras eran adornadas con extraños artefactos ninja. Objetos que con seguridad el Señor Hiashi no dudaría en usar contra mí si le hago algo a su hija—Tragué saliva—. Con algo de nervios, me senté en una de las sillas de madera que se encontraban en el recibidor. Un aire helado entró por la ventana, haciendo temblar todo mi ser y recordándome que aún seguía mojado.
—Aquí tienes Naruto-kun—Hinata me entregó una blanca toalla. Que por cierto, era muy cálida.
Sin pensarlo dos veces, me envolví con esta.
Hinata se sentó en un silla a lado mío. Tengo que decirle.
—Te lo diré de la manera más sincera posible—Llamé su atención—. Sé que esto se verá demasiado mal, ya que en primer lugar, fui yo el que te invitó a salir. Pero... A mí me gusta alguien más.
Se escuchó un sollozó por parte de Hinata.
—Comprendo—dijo con la vista fija en sus manos.
—Tal vez no lo entendiste bien—Hice una breve pausa—. No quiero decir que tú no seas una buena chica. Es decir, eres una grandiosa chica. Sólo que. No somos compatibles.
Rayos, soy muy malo diciendo estas cosas.
Sin pensar y casi por acción involuntaria, abracé a Hinata. Se sentía muy frágil. No podía expresar lo que siento con palabras. Lo mejor que puedo hacer ahora es, esto. La apegué más a mí. Ella empezó a llorar. Puso su cabeza en el hueco de mi cuello. El cuál empapo de manera lenta y constante con sus lágrimas.
— ¡Naruto-kun!—Sollozó—. ¡Te amo!
Mi corazón se hizo pedazos. Esta chica es muy tierna. Y lo peor, es que no puedo hacer nada por ella. Yo no siento lo mismo.
_____________________________
Espero que te haya gustado la lectura♡.
Si lo deseas puedes seguirme en instagram @alexibalu para encontrar poemas y pensamientos escritos por mí.
Instagram de mis minicomics, memes y frases lectoras: @oasisdelibros
Gracias por tu apoyo,
Alex.
P. D. Se apróxima la confesión de Naruto ♡
ESTÁS LEYENDO
La Ninja Akatsuki ☆ Naruto y tu
FanficMi vida en la organización Akatsuki es muy divertida. Pero más entretenida aún es mi misión junto al Jinchüriki Uzumaki. ¿Quiéres saber cómo comenzó todo? Si es así. Te recomiendo que sigas leyendoツ