El cuarteto de oro

19- Una mezcla inusual.

Dedicado a L4RRYReal

—¡Niños del demonio!— gritaba Filch realmente enfurecido.

Todo era muy divertido, Peeves consiguió harina y huevos para seguir lanzando a Filch, mientras Fred lanzaba una cubeta de agua helada, George y yo bailamos alrededor de Filch, luego hice el hechizo "Orchideus" e hice aparecer centenares de orquídeas moradas, después George lanzo un "pericullum" haciendo que muchas luces rojas se dispararan, nos tomamos de la mano y bailamos o mas bien brincamos como niños pequeños.

Pero no todo es diversión, Snape apareció anulando todos los hechizos con un solo movimiento de varita.

—Síganme— ordenó casi sin despegar los labios.

Filch iba detrás de nosotros muy fastidiado, Peeves como era de esperarse desapareció, sin embargo, nos seguimos riendo de aquello, Snape nos mandó a callar con una sola mirada cargada de odio.

Con las ropas llenas de agua, huevo, harina y orquídeas, con mi cabello todo mojado y lleno de yema de huevo, a mi parecer yo estaba normal, a comparación de los gemelos y su cabello rojo sedoso lleno de harina.

Gire la cabeza hacia atrás y muchos estudiantes (especialmente de Gryffindor) que van a su clase de cuidado de criaturas mágicas están viendo viendo sin entender lo que sucede, además Filch tiene una sonrisa entre fastidiada y feliz.

Lo feliz estaba debido a que seguramente nos a castigar limpiando el pasillo, llegamos a la oficina de Dumbledore, en donde la contraseña es "dulce de limón" Dumbledore cada que encontraban un dulce nuevo, cambiaba la contraseña.

Entramos, nunca había entrado allí, es sorprendente, hay cuadros de magos famosos dormidos, el sombrero seleccionador y hasta un ave fénix ¡Un fénix! Jamás en la vida había visto unos, hasta hoy. Nos quedamos parados pues si nos sentamos ensuciaremos las sillas con harina revuelta con huevo. Y al calentar la silla, tal vez se haga pan.

Pero como Dumbledore nos ama (a los Gryffindor en general) nos dejó sin castigo ¡En tu cara de squib, Filch! Bueno no, en verdad sólo nos puso a limpiar el desastre y diez puntos menos por cada uno, como sea, al final le pondrá cien puntos a Harry por respirar.

Me dirijo a la salida mientras intercambio miradas con Fred, sonrío sin mostrar los dientes.

—Señorita Patterson— llama el anciano director. —¿Podemos charlar?

Asiento y vuelvo a donde antes estaba. Todos los demás se van, hasta que quedamos sólo Dumbledore y yo.

—Te pareces tanto a tu madre— comenzó pensativo

—Muchos dicen eso, la verdad, mi madre tenía lo suyo y yo tengo lo mío.

—Te quiero comentar algo que probablemente no lo sabías, espero que te lo tomes a bien ¿Quieres dulces?— vuelvo a asentir y tomo un chocolate del tarro— ¿Conoces a los fundadores de Hogwarts?— pregunta.

En clase de historia de la magia se los habían enseñado eran Godric Gryffindor, Salazar Slytherin, Rowena Ravenclaw y Helga Hufflepuff.

—Dos de ellos, tienen herederos. Uno de ellos, es ya el famoso Lord Voldemort, que lleva como nombre...

—Tom Ryddle— interrumpo.

—Exacto, verás, tú tienes una sangre muy mezclada, ya sabés. Mamá sangre pura, papá hijo de muggles, abuelo muggle, abuela veela, abuelos sangre pura en una línea de pureza que se remonta a miles de años. Pero esto, es por tu padre. — trato de captar que es lo que intenta decir, pero su fénix me roba toda la atención, vuelve a hablar —Creo que su tía es una veela ¿Cierto?