El sentimiento era abrumador. La calidez era abrasadora. Y lo digo así porque así era. No estaba sobria pero mis sentidos estaban totalmente avivados.
Sus labios finalmente se separan de los míos para recuperar el aliento. Siento como mi estómago se encoge de necesidad. Chase me mira fugazmente a los ojos para luego acercar su cara de nuevo hacia mí pero esta vez junta su mejilla contra la mía.
Me dan escalofríos al sentirlo respirar pesadamente contra mi cuello.La música a todo volumen se ensordece para poder escuchar sólo nuestras respiraciones.
Cuando cobró la noción sobre el asunto intento apartarme pero me sorprendo al notar que las manos de Chase sostienen firmemente mi cintura. Cuando subo mi mirada para verlo descubro que él me observa.Un atisbo de confusión asalta su cara para luego soltar mi cintura y alejarse un poco. Imito su acción y suelto todo el aire en mis pulmones.
- Tenemos que irnos - Se limita a decir con la voz enronquecida.
Asiento y nos encaminamos a la salida. No nos despedimos de nadie pues estoy demasiado abrumada para eso.No me siento ebria pero me siento
vulnerable por alguna razón y al Chase estar cerca, ese sentimiento es todavía mayor.
En cuestión de minutos subimos al carro y Chase arranca para sacarnos de ese lugar. El silencio rige sobre nosotros como siempre.Me encuentro sumida en mis pensamientos cuando de repente mi mano se dirige a mis labios recordando el beso.
Chase parece notar la acción pues esta atento a cada uno de mis movimientos a pesar de ir manejando. Rápidamente alejo mi mano sintiéndome tonta.
Después de un rato llegamos a la mansión.- ¿Qué hora es? - Pregunto con la voz apagada.
- Es tarde.
Abre la puerta para luego bajarse. Bajo del carro y comenzamos a caminar hacia la entrada. Los grillos resuenan y el jardín se ve oscuro.
Entramos. Esta vez con normalidad pues no había de que escondernos. ¿O si?
Mamá sabía que iríamos a una fiesta así que, ¿qué esperaba?Subimos las escaleras, yo adelante de el. Y de la nada me siento rara. Me encuentro subiendo las escaleras de la casa que comparto con mi hermanastro al cual acababa de besar en una fiesta donde había bebido un líquido que se había encargado de aturdirme todavía más.
Al llegar a mi puerta, por alguna razón dudo en abrirla así que me giro sobre mis pies.
Chase camina hacia mi.El deja vu de volver a verlo en la oscuridad es fastidioso.
Y se ve tan lindo.Se detiene justo en frente de mi. ¿Y ahora que? Estoy nerviosa. Odio estarlo, pero así es.
-Buenas noches Isabella.
- Buenas noches Chase.
No se mueve. Pasan unos segundos después de que al parecer decide entre hacer algo o no y da media vuelta para dirigirse a su habitación.
Antes de entrar a mi cuarto volteo y me encuentro con el haciendo lo mismo. Sonrío y me adentro en mi habitacion.
Mis músculos por fin se relajan y mi cabeza que da vueltas se tranquiliza. Me recuesto en mi cama y después cierro los ojos para caer en un sueño
profundo.*******
Después de 20 minutos de un debate de mi cuerpo contra mi cerebro finalmente me paro de la cama. Algo parecido me pasa todas las mañanas. La flojera es mi debilidad.
Los recuerdos de la noche anterior golpean en mi cerebro y el arrepentimiento también.
Y lo único en lo que puedo pensar es : "¿Que carajos era esa bebida rosada?"Sea lo que sea. Esa simple bebida había causado que me besara con mi hermanastro, y bueno, las hormonas también habían causado eso. El punto es que ahora todo se volvería más incomodo de lo normal. A menos que él no lo recordara...
ESTÁS LEYENDO
Enamorada de mi hermanastro
أدب المراهقينEn este libro se relata la loca historia de una adolescente llamada Isabella, donde ella misma relata todas las locuras que vivió al lado de su hermanastro Chase. Los dos se enamoran y tienen que enfrentar todos los obstáculos que les trae su proble...