NARRA AKIRA
Ahora estoy sentada en la banca de un parque intentando de acomodar mis ideas.
Estuvo bien o mal lo que hice?
Después de todo soy un demonio y debo actuar como tal. Pero esto no me gusta. No me gusta ser el monstruo.
Es diferente, darle alcohol o drogas a un adulto o a un joven que ya tienen la madurez suficiente para decidir entre lo bueno y malo, pero un niño? Simplemente no es correcto.
Levanté la vista al sentir que alguien se sentaba a mi lado. Era Andrés.
-En dónde estabas?- pregunté.
-Eso mismo te iba a preguntar, pero se que no quiero saber la respuesta. No quiero estar mas molesto de lo que ya estoy contigo- dijo algo dolido.
Yo solo baje la cabeza y me mantuve en silencio.
-Me puedes explicar porque hiciste eso, Akira?
Iba a decir algo pero él me interrumpió.
-Teníamos una promesa- ahora si se notaba lo decepcionado que estaba.
-Lose...lose maldita sea lo lamento
-Porque?
- Esa misma pregunta me hago yo... porque?- dije con cara de tristeza.
-Ay Akira no me digas que le tuviste compasión
-Es solo un niño Andrés
-Ya te lo dije, nosotros nos encargamos de vender la mercancía ya lo que haga el cliente con el no es nuestro problema
-Eso lo entiendo, pero el niño que tenía la culpa!- grite al final dejando mis lagrimas salir.
Cuando Andrés finalmente me miró directo a los ojos se quedo impactado por mi reacción. Forzó un suspiro de frustración pasó una mano por su cabello y luego se acercó a mi para secarme mis ojos pero yo miraba hacia el otro lado no podía verlo en este momento.
-Aki...- dijo suavemente- Mira no quiero que pienses que nosotros somos los monstruos porque no lo somos, si?
No estaba de acuerdo entonces solo me mantuve en silencio.
-Como dije nosotros solo vendemos la mercadería
-Lose pero...
-Pero nada, eso es todo lo que hacemos, no estamos lastimando los humanos. Si le dejamos de comprar droga a este cliente solo porque sabemos que droga a otros niños este solo buscara otro proveedor y listo. No dejara de hacer el mal. Nosotros somos demonios no podemos evitar que les hagan daño a esos niños. La creación de el Gran Hombre es mala ellos son los que hacen el mal no nosotros. No somos los monstruos. Entiendes?
-El Gran Hombre es el que permite que estas cosas sucedan?- dije confusa.
-Así es.
Había muchas preguntas en mi cabeza. No podía posiblemente entender.
-Mira, no te preocupes por eso ahora si? Es algo que tu hermosa cabecita no entendería. Por otro lado tengo algo que te puede hacer sentir mejor.
Lo mire con sospecha y curiosidad.
-Estuve donde el Jefe y hablé con él. Y te conseguí una asignación.