El Perdón: Miradas de amor, Cristian y Anastasia (2 T)

Capitulo 5: Regreso golpeado

POV CRISTIAN

Todo está mal. Todo me sale mal. Desde que Ana se fue haces unos días, he perdido más de 4 negocios por me genio. He peleado con Camacho y lo he mandado a la punta del cerro. Y Lara no me habla, ya que le respondí de mala forma. Genial. Todo se está saliendo de control por culpa de mi mujer escapista.

Estoy sumido en mis pensamientos en el despacho. Por más que he intentado acordarme de que fue lo que le dije a Ana para que ella tomara la decisión de irse, no me puedo acordar. Es muy frustrante. De la nada aparece Lara con mi almuerzo pero no me habla. Entra y sale, sin decirme no siquiera hola.

Como en silencio pero hasta la comida me sabe a nada. La extraño demasiado y de hecho extraño también a Lily. Por más que he intentado no encariñarme con ella, he fracasado rotundamente y la extraño. Extraño los ruidos que hace cuando Ana la muda, las caras que pone cuando nos escucha o cuando se mete completamente la mano en su boca. Dios, desde que llego a esta casa, las cosas más sencillas se me hacen perfectas y llamativas.

Escucho que algo cae al suelo y se rompe y luego un grito. Se perfectamente que ese grito es de Lara. Salgo del despacho rumbo a la cocina pero en el trayecto me encuentro que Lara estar en el pasillo que da camino a la entrada. Allí esta Amelia con unas maletas. Mierda que no sea lo que estoy pensando.

-hola, cariño. Vengo a hacerte compañía. Sé que estas solito. Que tu novia te dejo. Así que estoy aquí para consolarte- se acerca a mí pero al instante retrocedo. No quiero que está cerca de mí. Ella se da cuenta de mi rechazo y me fulmina con la mirada.

-no estoy solo y no me han dejado. Así que regrésate por donde viniste- le digo molesto.

-pero Cristian, ¿Por qué me rechazas? ¿Es que acaso no te gusto? ¿No te atraigo como mujer?- la verdad quiero matarte por todo menos mujer que eres.

-no me gusta. Amo a mi mujer y no dejare que nadie se meta en mi relación. Menos una mujer que me abandono. Así que mejor vete- le digo y cuando intento entrar a la casa, el sonido de una camioneta me hace volver a ver quién viene. Mi corazón se acelera al ver que la camioneta vieja de Ray está entrando a la hacienda. ¿Le paso algo a Ana o a la bebé? No quiero pensar que vuelven porque es imposible. Ella pidió distancia, aunque ya han pasado casi 5 días.

-patrón, ¿podría ser la patrona?- me dice Lara bajito.

-ruega a todos tus santo que eso cierto- le digo.

Cuando la camioneta llega a la entrada me sorprendo, cuando Ray baja y abre la puerta. Se mete en la parte trasera de la camioneta y aparece con Lily en sus brazos. Esa señal hace que mi corazón se acelere a un más y ruego a Dios de que Ana también este en la camioneta. Ray se hace a un lado y baja la mujer que más amo en este mundo. Siento que mis piernas están como gelatina y tengo ganas de correr a su lado, besarla y no soltarla más.

-¿Qué haces tú aquí? No te das cuentas que sobras, hermanita- dice Amelia. La fulmino con la mirada. Veo que Ana sonríe.

-solo estoy tomando lo que me pertenece. Esta es mi casa, todo lo que hay aquí me pertenece, incluyendo al dueño de esta hacienda. Y no voy a permitir que...- tapa los oídos de Lily –zorras como tu vengan a meterse con mi hombre- dice mientras besa la frente de Lily.

-¿tu hombre? Así que tú eres la noviecita que lo dejo. Por Dios, no tienes amor propio anastasia. Ese hombre jamás estará contigo porque él me ama a mí- le dice con arrogancia.

-puede amarte pero la señora Grey y la patrona de la hacienda soy yo- eso es nena ponla en su sitio. Veo que Lara está sonriendo por las respuestas de Ana y Ray se le infla el pecho al escuchar a su hija defendiendo lo que le pertenece con dientes y garras.

-¿tu, la señora Grey? Ni que tú hubieras casado con él. Este hombre es mío y jamás me traicionaría contigo. Una bastarda enferma y con poca gracia- le gruñe. Antes de que Ana contraataque, hablo yo.

-te equivocas Amelia. Ana y yo nos casamos hace casi dos meses. Por lo tanto si es la señora Grey. Tiene todos los derechos y la ley la ampara. Además esa que según tú tiene poca gracia, es la dueña de mi corazón y ya no hay espacio para ninguna más- le digo. Veo como Lara se da aire con la bandeja que se le había caído. Esto parece una escena de telenovela que pone la piel de gallina a los televidentes.

-¿Qué? Ray dime que es mentira- le dice Amelia.

-no es mentira. Anastasia es la esposa de Cristian- le dice mientras acuna a la bebé en sus brazos.

-eso es imposible. ¿Cómo es posible? Acaso me fuiste infiel con mi hermana. ¿Desde cuándo?- me fulmina con la mirada y luego mira a Ana.

-deja de hablar tonterías Amelia. Ana nunca se metió con tu ex-novio. Es mas esta boda salió por tu culpa. Al dejar a Cristian el día de la boda, busco una solución y la única que hubo fue que se casara con anastasia y eso se hizo- le dice Ray.

-eso no es posible. Y créeme, esta me la vas a pagar Anastasia. Nadie me quita lo que es mío y esta no será la primera vez- dice agarra sus cosas y la hecha en la camioneta de Ray -¿me puedes llevar a la casa?- le gruñe pero Ray acepta. Le entrega la bebé a Lara y baja las cosas que habían traído. Veo que le dice algo a Ana, ella asiente y se acerca mientras su padre se lleva a Amelia. Pobre de su salud mental.

-Ana no sabes cuánto te he...- no alcanzo a terminar de decir la frase cuando siento que mi mejilla arde. Mierda me abofeteo. Puedo ver rabia en sus ojos.

-esto... es por besar a Amelia. Eres mío Cristian Grey y no te di permiso para que eso. Es hora de hablar Cristian. Es hora de poner las cosas claras- pasa por mi lado. Abraza a Lara y entra. Respiro. Yo pensé era una mujer tierna y dulce pero me ha demostrado que puede ser una fiera. Masajeo mi mejilla que aun duele. Bueno yo era el más deseoso en hablar con ella y aquí vamos. Aunque debo reconocer que me da miedo.

¿SE ESPERABAN UN REGRESO ASÍ?... 

ESPERO QUE LE HAYA GUSTADO... 

SE VIENEN MUCHAS COSAS Y ESTE ES SOLO EL COMIENZO... 

LAS QUIERO MUCHO... 

Y NOS LEEMOS PRONTO