El Perdón: Miradas de amor, Cristian y Anastasia (2 T)

Capitulo 7: ¿Embarazo?

POV ANASTASIA

Es de noche y la tormenta no quiere dar tregua. Hace cinco días que volví a la hacienda y hace cinco días que no tengo a mi hombre al lado. Estamos llevándonos mejor y comunicándonos mucho mejor. El esta conmigo todo el tiempo que puede y si sale a algún lugar no me deja sola.

También he seguido con las clases de conducir. Tenía que hacerlo ya que algunas veces me daban ganas de salir de la casona y dar una vuelta por los alrededores y llevar a Lily pero hacerlo a caballo no es la mejor opción, me da miedo que se pueda caer y caernos las dos.

Desde la mañana se veía que venía una tormenta como la que nos llevó a intimar. El agua no ha parado y lo peor es que está haciendo bastante frio.

Lo bueno es que Cristian puso una cuna en mi pieza para que Lily pudiera dormir conmigo y lo que me sorprendió fue que el también dejo una cuna en su cuarto. Sin querer admitirlo este castigo que está saliendo bastante caro.

Un trueno me hace saltar en la cama y Lily comenzó a llorar. Me levante como pude y la tome en mis brazos para poder calmarla pero no puedo, ella percibe mi miedo y llora más fuerte. Maldición. En eso un grito desgarrador me pone los pelos de punta. ¿Es Cristian?

Mientras la lluvia cae avanzo con cuidado hasta la habitación de Cristian. Lily va en mis brazos y los espasmos por su llanto se hacen notorios. Entro en la habitación y veo que se remueve en la cama y se queja. Dejo a la bebé que está más calmada y me acerco a su lado.

Su respiración es fuerte y es como si estuviera jadeando. Su pecho baja y sube rápidamente. Su cuerpo tiene una capa de sudor y su espalda esta rígida, en realidad todos sus músculos están rígidos.

-Cristian- digo despacio mostrando la poca tranquilidad que tengo. En no despierta pero se queja.

-Cristian, por favor abre los ojos- le digo. Él se vuelve a remover pero esta vez habla.

-no... quiero- dice en un susurro.

-¿no quieres qué?- le pregunto.

-no quiero... estar... solo-

-nunca estarás solo, cariño-

-ella se fue... me dejo... y fueron días... negro- dice

-¿Quién se fue?- veo que se retuerce y suspira pesadamente.

-mi mujer. Ella se fue... me dejo solo... no quiero... a la bruja... de vuelta... en mi vida... me hizo daño- dice con dificultad.

-no va a pasar- le digo.

-ella esta... distante... sonríe pero... no es lo mismo... la necesito conmigo... ella es mi vida... mi fuerza... pero no... está a mi... lado- dice.

-Cristian estoy a tu lado. Abre tus ojos, por favor- en ese instante un trueno hace retumbar todos los vidrios de la casona. Mi corazón salta en mi pecho y Lily vuelve a llorar pero gracias a Dios Cristian abre los ojos.

-¿Qué pasa? ¿Por qué estás aquí?- me dice con voz adormilada.

-tenemos miedo. Odio las tormentas y está cayendo una horrible. Lily aún no se ha calmado, Cristian se levanta de la cama antes de que yo lo haga y toma a la pequeña en sus brazos. A los segundo ella se calma y observa con esos ojos que hechizan a su Cristian. Yo sonrió. La acuna en sus brazos y cuando confirma que está dormida la deja en la cuna.

-lo siento. No quería despertarlas- le miro sin entender.

-no estabas dormidas. La tormenta no nos ha dejado dormir-

-no es solo por eso. Sé que tuve una pesadilla y lo sé porque mi voz es ronca y mi garganta duele, eso ocurre cuando grito- me dice.

-¿siempre las tienes?-

-no. Muy pocas veces ocurren pero son horribles- dice.

-¿puedo dormir contigo?- pregunto. No quiero estar sola en las tormentas y él es el único que me puede apoyar.

-claro. Ven. Abre la cama y me invita a entrar. No lo dudo. Él se acomoda en su lado pero no me toca. Me comienzo a acercar despacio pero no hace el intento de tocarme. Sé que yo inicie esto pero lo necesito. ¿Qué me está pasando? Pasan los minutos y seguimos así, tan juntos pero tan distantes.

Salgo de la cama y sé que me está mirando. Veo a Lily que duerme tan tranquila ajena a todo lo que está ocurriendo. Me paro en el marco de la ventana y observo el paisaje. Esta nublado pero solo llueve. No hay rayos ni truenos. Solo lluvia. Es un paisaje sombrío, igual que mis pensamientos negativos.

Siento que se comienza a acercar pero no me toca. Aun así no me muevo, sabe que sé que esta atrás de mí, pero aun así no habla. Como si estuviera dudando posa una mano en mi cadera y al ver que no la rechazo, coloca otra y luego su cuerpo se junta con el mío.

-¿Qué ocurre?- me pregunta mientras afirma su cabeza en mi hombro.

-no lo sé. Estoy complicada, ni yo misma me puedo entender- le digo. Despacio mete su mano debajo de camisa y comienza a subir hasta llegar a mis senos. El toque que hace en ellos provoca un escalofrío. Se toque se siente tan bien pero a la vez no es igual que las veces anteriores, sino que siento que es más excitante. El comienza a acariciarlo más como si quisiera comprobar algo.

-¿Qué pasa?- le digo cuando los toca más que otras veces.

-están más grandes y más sensibles- me dice. Frunzo el ceño.

-¿Cómo lo sabes?- le digo. Me doy vuelta y lo miro.

-porque conozco tu cuerpo mejor que tú misma. Algo está cambiando en ti. Me di cuenta de eso hace unos días. Tus caderas están un poco más anchas pero tus senos están mucho más grandes, más sensibles. Tus seños caían perfectamente en mis brazos pero ahora llenan más- me dice y besa mi nariz.

-¿Qué significan esos cambios?- le digo.

-pueden ser dos cosas-

-¿Cuáles?-

-la primera es que la naturaleza te quiere más bella para joderme la vida o la segunda es que tu cuerpo está cambiando, ya que necesita que se adapte a lo que llevas en el vientre- lo miro son entender.

-¿de que estas hablando?-

-creo pequeña, que estas embrazada- me dice con una sonrisa en los labios.

-¿Qué?- santa madre. ¿Embarazada? ¿Podría ser?

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO... 

LO HE ESCRITO CON MUCHO PORQUE LAS QUIERO Y LAS VIVO CONSINTIENDO... 

Y COMO SIEMPRE DIGO NOS LEEMOS PRONTO