En las buenas te quiero y en las malas también. {Gemeliers}

CAPÍTULO 21

Lo siento muchisimo de verdad, no he subido nada durante media vida. Ya tengo un portátil y me resultará mas fácil escribir, así que mejor JAJAJAJA.

¿Qué tal os va a ustedes? :3

Pd: VOTAR Y COMENTAR!! 

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- ¿Aquí en Palomares hay alguna farmacia cerca?

-¿Tu te crees que yo se algo de este pueblo? - Dije inocente.

- Pues entonces tendremos que preguntar a alguien.

Estuvimos buscando a gente, pero que va, parecía que se habían puesto de acuerdo en no aparecer por allí. 

- A tomar por saco. -Dije y seguidamente llamé a mi hermana, le pregunté por la farmacia, me contestó y colgué.

- ¿Qué ha dicho?

- Que está a las afueras del pueblo, así que tendremos que andar.

- ¿Más? Llevamos andando más de quince minutos. - Se quejó

Fuimos en busca de la maldita farmacia, hasta que llegamos a ella por fin.

Le di el papel que me dio el médico y el farmacéutico me dio las inyecciones.

Nos estuvo explicando a mi y a Jesús como ponerlas.

- Pues muchísimas gracias señor.

- De nada mujer. Hasta pronto parejita. -Se despidió el farmacéutico cuando saliamos de la farmacia.

- Parejita. -Me miró.

- Parejita. -Lo miré.

Se formó un momento incómodo.

- Que salao es ese señor. -Dijo cambiando de tema.

- La verdad que si. ¿Vamos a casa?

- Sí. ¿Cuánto tiempo tienes que estar poniéndote eso?

- Creo que dos o tres meses, no me acuerdo que me dijo el médico, por ahí lo tengo apuntado.

Llegamos a casa y Dani no estaba, mi hermana estaba con el móvil en la cama escuchando música. 

Dani y Lucía no saben nada de que he vuelto a hablar con Jesús.

No se como hace Jesús para ocultárselo a Dani.

De repente el móvil de Jesús sonó y mi hermana al escuchar el sonido gritó mi nombre.

- Jesús sal fuera, antes de que venga mi hermana. -Susurré.

- Es mi hermano, después nos vemos. -Me dio un beso en la comisura de los labios y se fue.

Mi hermana gritó por segunda vez al ver que no obtenía respuesta.

- ¡Dime!

- Me habías asustado Aina, creía que era un ladrón.

- Eres tonta.

- ¿Qué es eso? -Señaló la bolsa que tenía.

- Mis inyecciones que me tengo que poner.

- Ostia, es verdad ¿qué te ha dicho el médico?

Le estuve contando todo...

Mientras tanto...

Llegué a mi casa después de la llamada de Dani. 

No se que carajo quería, pero bueno.

Abrí la puerta y estaba Dani... ¿vestido de princesa?