Los brazos que envuelven mi torso son tan cálidos que no quiero soltarme nunca de ellos pero al ver la hora en el reloj de pared me levanto y dejo un beso en la mejilla de Al.
Él lanza un gemido y de un tirón me acomoda a su laso con sus brazos impidiéndome moverme.-Al -susurro con voz recriminante- Son las nueve, tus padres nos verán.
-¿Recuerdas por qué te levantaste anoche? -pregunta con voz somnolienta y los ojos cerrados.
-No...
-Al parecer fue porque recibí un mensaje de ellos -se revuelve y me atrae más a sí- Lo ví hace unas horas, no vinieron.
-Ya pero tengo que ir a casa -acaricio sus dedos que se cierran en mi cintura.
-Quédate un rato más y prometo llevarte- Suelta un bostezo y yo río- Pero antes te haré el desayuno... y...
-Si lo preparas en esas conficiones te dormirás sibre el café -abrazo sus hombros sin evitar reírme por lo tierno que se ve dormido, aunque es mejor no subestimarlo, ayer dejó a un universitario tirado por meterse conmigo. Quien sabe de que más sería capaz este somnoliento buen amigo.
-Pero te reirás Lissie -abre los ojos por primera vez y toma la punta de mi quijada pensativo. Sus ojos se relajan- ¿Estás bien?Sabía por donde iba esto, solo necesitaba decirlo para corroborar mis dudas. Pienso recriminarlo pero es muy evidente lo preocupado que está por mi, auqnue no hubiése llegado a mayores. Claro, hubiése sido algo grande si él no habría ido por mí pero llegó y yo sabía que vendría desde que lo llamé.
-Sí, gracias a ti Al -sonrío y beso su mejilla- No se que hubiera pasado si tú no...
-Shhh -sisea apoyando su frente en mi boca- Lo importante esnque estás bien Lissie y creo que sible sacámos una foto de como dejé a ese tipo, nunca más tendremos un problema igual. Pero te juro que nunca permitiré que nadie se sobrepase contigo, es más, nadie que tenga la intención de hacerte daño estará a menos de tres metros de ti y yo me encargaré de que así sea.
-Estoy segura de que lo harás -digo cuando quita su frente de mi boca- Por eso es que confío en ti y te quiero Al.
-Y yo a ti ,Lissie -se sienta conmigo a su lado y mi cabeza apoyada en su hombro- Pero me preocupa en que abda Anne ¡Una fiesta de universitarios! Nada menos y tenía que llevarte.
-Yo no lo sabía -inquiero. Asiente y vuelve a besar mi frente.
-Lo sé pero... -dirije la mirada a otro lado y yo atrigo su rostro a mi.
-Pero... -lo invito a continuar.
-Sabías que del corto que tenía el... vestido -a penas lo dice me abraza escondiendo la cara- No es que sea celoso, lo sbaes. Soy protector, sí pero es que no quiero que te crean una... -se acalla al ver mis ojos abrirse de par en par. Me suelta y advierto que acaba de darse cuenta del gran error que cometió- No es lo que yo... es que... Dime ¿Tú elegiste ese vestido?
-No -tardo un poco en darme cuenta lo dolida que suena mi voz.
-¿Te gusta? Me refiero que...
-Me pareció un lindo vestido pero... no estaba hecho para mí. Es muy corto y fue hecho para resaltar partes que yo prefiero no resaltar.
-Y ¿Por qué te lo pusiste? -su voz se oye pausada y temerosa, como si temiera decir algo guera de lugar, aunque no entiendo su cuidado. Él puede decírmelo todo y aún así lo entendría de cualquier forma.
-Porque... -trato de buscar una escusa pero nada lógico se me ocurre, así que me levanto y corro a su habitación. A penas llego, me acomodo sobre una de sus almohadas y me hago un ovillo esperando que el interrogatorio haya acabado, pero Alexis irrumpe en la habitación y se recuesta a mi lado cerrando la puerta. Sus brazos se encuentran nuevamente en mi cintura y siento como el sueño me vence.-Porque... -me invita a continuar imitándome.
-No lo entenderías -me reincorporo y me siento, él ladea la cabeza y levanta la barbilla, cosa que interpreto como un “continúa” y decido hacerlo- Anne me insistió tanto que cedí. Nunca pensé que sería tan corto pero debí imaginármelo, ella lo había comprado. Y de los universitarios no sabía hasta que tuve uno encima, pero ¿Sabes? No me avergüenza hablar de todo esto contigo y tú no deberías sentirlo.
-No lo estoy es solo que... creces, Lis y odio sonar como tus padres pero es cierto. Creces y cada vez eres más atractiva para los chicos por eso nadie entiende porque no he edtado contigo -asiento, a mí me sucede lo mismo así que lo entiendo- No te pido que vistas como anciana pero creo que tú y yo sabemos que ese no es tu estilo y que no todos los chicos saben que soy tu mejor amigo.
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Una increible coincidencia
Teen FictionElla creía poder mantener la falsa sonrisa estampada en su rostro, para esconder su añoranza de tiempos pasados que nunca volverían. Él salía adelante sin importar el trato que recibía de su entorno y el descuido total de sus padres. Pero ambos sabí...