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Le doy un abrazo y sonrío aprovechando que no me ve.

-No puedo creerlo –dice al separarnos.

-Tampoco yo.

- ¿Por qué no me dijiste? –pregunta confundido, pero sin dejar de sonreír.

-Porque preferí sorprenderte.

-O simplemente porque eres así.

-En efecto.

Niega sonriendo, pero a mí no se me ha borrado la sonrisa desde que llegué.

- ¿Lisa?

Me volteo y veo a mamá detrás de mí con su maletín al lado, muy confundida.

-Ah, má te presento a Derek –lo señalo.

-Bienvenida señora –dice Derek- luego de dejar un beso en su mejilla.

-Gracias, querido... ¿Eres amigo de Lisa? –pregunta con suspicacia.

-Si... nosotros nos...

-Es el primo de Sophia, má –lo interrumpo echándole un cable- ¿No lo recuerdas?

-Eh... yo no...

-No se preocupe señora, no soy de cara imponente –bromea guiñándole un ojo.

-Ay, discúlpame –mamá se sonroja y verla me hace sentir culpable, pero al menos había conseguido sacar el tema del paso.

-Vamos –tomo a mamá de la mano para irnos de ahí.

Derek toma nuestras maletas luego de varias negaciones mías y salimos a la parada de autos.

- ¿Las llevo o esperarán a tu papá? –me pregunta cuando nos encontramos delante de su auto.

-No ¿Podrías hacerlo? Sería genial.

-Claro, suban por favor –nos abre la puerta y nos acomodamos dentro de su auto mientras él guarda nuestras maletas en el capot del auto.

-Se ve lindo –me susurra mamá con un gesto de asentimiento antes de que Derek vuelva, lo cual no me da tiempo de responderle.

Él abre la puerta del conductor y se adentra en el auto sonriendo. Cuando enciende el auto, el equipo de sonido pone la canción que él estaba escuchando antes de llegar.

Getting better de The Beatles.

-Un fan de The Beatles más para mi lista –dice mamá mientras empieza a buscar algo en su bolso. Sé que es, siempre lo busca cuando esto ocurre.

-Mi tía tiene la culpa –comenta deteniéndose en un cruce de autos- Siempre me hace escucharlos.

-Eso me alegra, lo apuntaré en mi lista –dice ella después de encontrarla.

-No entiendo –dice él sonriendo confundido.

-Mamá cree que algún día conseguirá la lista entera e los millones de fans de The Beatles, algo que yo considero una pérdida de tiempo total.

-Mi caso fue obvio, pero ¿Cómo hace para reconocer a los fans comúnmente?

-Noto cualquier indicio –le responde luego de preguntar su nombre y el de su tía- Camisetas, pines, si tararean una canción y muchas otras cosas.

-Y ¿Si lo ve en la calle?

-Se vuelve más divertido... para ella –digo poniendo los ojos en blanco.

- ¿Les habla? –pregunta girando a verme divertido.

¿Cómo nunca noté ese hermoso par de ojos? Eh, ya sabía que tenía lindos ojos, pero nunca me tomé la atribución de decir cuánto me gustaban.

Una increible coincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora