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11:55 pm

Ethan llamó a la policía; quien golpeaba a Mara era su padre que se encontraba ebrio. Por lo que le escuchó decir a la tía May él siempre había sido agresivo pero esta vez se había pasado de la raya. May le agradeció a Ethan por percatarse de la situación y salvar la vida de su sobrina.

Bueno, a medias.

En esos momentos se encontraba en el porche de la casa, cubriendose con una sábana, con sus tres hermanos a su lado. Tayler, el mayor, se encontraba furioso, le había agarrado un cariño inmenso a Mara, Damian, el otro chico que estaba con Tayler cuando Mara los vio por primera vez, estaba con la vista perdida, luego estaba Ethan, que lloraba en silencio abrazando a su hermanito Kile, que si bien tenía catorce, al igual que Mara, parecía un niño al cual le arrebataron un dulce. Ver a Mara en la camilla le afectó y se transportó a una situación en la cual él era el que estaba en la camilla, y se puso a llorar. La mamá de Mara lloraba abrazada a su madre, quien a su vez era abrazada por el hermano de Mara.

El papá de Mara había logrado darle fuertemente con un sartén en la cabeza mientras Ethan llamaba a la policía, quien minutos después llegaron y arrestaron al padre de Mara. La ambulancia tardó un poco más en llegar, y ahora se encontraban poniendola en ella.

Mara estaba en coma, el golpé la había afectado en la parte trasera de la cabeza. Ethan se sentía culpable, si tan sólo hubiera sido más valiente y hubiera dejado que Mara lo viera, tal vez hubiera entrado a su casa y hubiera golpeado a su papá, la hubiera protegido, él hubiera recibido el golpe y Mara estaría bien...


La llamada del chico de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora