Entre Nosotros

+Capítulo especial 2.

POV: Mamá de Sophie.

Estábamos en una cueva. Lugar de los Eustyhs. Helenna y mi esposo estaban... convertidos en otra criatura totalmente distinta a la que eran.

Helenna, mi pequeña... estaba destrozada, ojeras, su labio cortado, ojos marrones. Era totalmente una Eustyhs, ya no había vuelta atrás.

¿En qué estarían pensando? Destruyeron a mi familia, la mitad de mi familia. Sophie es la única que puede ayudarnos. Ayudarnos a escapar y ser lobos de por vida o, por otro lado, escapar y volver a ser simples humanos.

Sentía lastima por ella, no puede cambiar su forma. Por más fórmulas o lo que sea que utilicen ahora, ella no puede cambiar. Lo lleva en su interior. El vampiro más poderoso de todos, quién lo diría, siempre pensé que lo sería yo. De tan pequeña lo soñaba.

Ellos estaban en camino, podía olerlos. Por más que cada día mis poderes se vayan disminuyendo, el olfato es lo único que siempre quedará vivo. No venían solos, sus manos estaban con botellas e inyecciones. Iban a transformarme y los sabía desde el primer momento.

Helenna no me reconocía y eso me partía el alma, mi esposo podía controlarse pero eso no hacía que deje de ser un lobo más, uno manipulable que podría dañarme cuando se lo ordenaran. Pero lo que más me partía el alma, el corazón y todo en mi era Sophie. Para este momento ya debe saber que se encuentra entre la muerte y la vida. Matar a sus padres o lograr dominar el más poderoso poder que posee. El amor verdadero. Es difícil de controlar, nadie lo ha hecho y por más apoyo que deba darle a mi hija... dudo de que lo haga. Aunque Adam la ayudaría lo suficiente.

Adam. Él sabía lo que se venía y le hice prometer no buscarnos. En estos momentos en lo único que debía preocuparse era en la vida de mi hija.

Tres días para la batalla. Solo tres días. Tres días en los que me transformaría y para ese entonces perdería el reconocimiento de lo que haría. Podría matar a mi hija siendo manipulada por lobos. Pero eso no pasaría, ella es la más poderosa y debe vivir. Pero lo que si podría pasar sería lo contrario.

Ser asesinada por tu hija. Nunca lo hubiera imaginado.

Lo único que deseo en este momento es que pueda prepararse bien, con todas las estrategias que se conozcan, pero también deseo que luego de la batalla ella siga viva y feliz. En ese entonces desearía estar allí con ella, viendo su cara de princesa, de la princesa que llena cada vacío de mi interior con su hermosa sonrisa. Y que cuando llegue a casa con Adam, ya fuera de peligro, pueda encontrar mi carta. La carta que escribí con todo el amor que poseía. Ya no voy a poseerlo, porque cuando me transformen... no tendré conciencia de lo que haga.

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