Capitulo 34

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6 MESES DESPUES.

- ¡HE APROBADO! ¡HE APROBADO!- empecé a chillar bajando las escaleras.

Cuando bajé las escaleras, tuve que parar para coger aliento, mi barriga estaba bien crecidita y ya no estaba para estos trotes. Richard y Fred se asomaron al pasillo.

- ¿Qué pasa?- dijo Richard que me ayudó a ir al salón para sentarme.

- ¡Me he graduado!- dije emocionada- Dentro de unos días me enviaran el diploma.

- Pero si estamos en mayo... Nosotros nos graduamos en junio- dijo Fred señalando a él y a Richard.

- Ya, pero yo lo he hecho antes. ¡Que emoción!- dije sonriendo como no lo hacía desde hace meses.

- Me alegro por ti cariño- dijo Richard y me abrazo.

- Aush- dije encorvando la espalda y agarrándome la barriga- La pequeña parece que también se alegra.

Si, tenía una preciosa niña en mi vientre, ya llevaba 7 meses de embarazo que se pasaron volando. Richard me dejaba las mañanas solas, porque tenía que ir a la escuela, yo aprovechaba para hacer deberes y demás. Llamaba de vez en cuando a Roxana y a Wendy, ya que se preocupaban de mi embarazo, nunca les dije donde estaba. Estaba bien aquí, pero no puedo negar que lloro cada noche... Como me hubiera gustado que Yayo estuviera aquí, acariciando mi barriga, soportando mis cambios de humor y vómitos. Unas pequeñas lágrimas bajaron por mis mejillas.

- ¿Por qué lloras?- dijo Fred.

- Cielo, son las cosas del embarazo- dijo Richard acariciando la rodilla de Fred- ¿A qué si?- dijo mirándome.

- - Asentí con la cabeza- Pero extraño a Yayo.

- Elegiste mal al alejarte de él- me dijo Fred.

- ¡Pero lo hizo para que Yayo no tuviera las ataduras de un bebé!- me defendió Richard.

- Seguro que Yayo al saber eso se habría puesto feliz- dijo Fred.

Empezaron las mismas peleas, sobre si lo hice bien o no.

- ¡CALLAROS!- grite- Sois peores que dos marujas

Entonces enfadada subí de nuevo las escaleras, me encerré en mi cuarto pegando un portazo y me tumbe en la cama, agarrando mi barriga y llorando. Stella... Stella Gutierrez.

NARRA YAYO.

- ¿Te ha llamado?- le pregunté a Roxana.

- POR MILESIMA VEZ, TE HE DICHO QUE NO- me grito un poco histérica.

- Perdóname, solo quiero enterarme de como esta mi ___ y mi hija- dije suspirando.

- Lo sé Yayo... No te tendría que haber dicho que eras padre cuando me lo preguntaste.

- Oh, claro que si me lo tuviste que decir... Es importante esto para mi.

- ¿Y por qué no la vas a buscar? Si tan importante es...- dijo Wendy.

- No sé ni por donde empezar... Con sus padres no ha podido irse y no conozco a nadie más.

- Lo tienes difícil- dijo Roxana.

Agache la cabeza entre mis rodillas, suspiré.

- Lo tengo crudo, pero no voy a perder las esperanzas, quiero estar allí cuando mi niña nazca, quiero darle fuerzas a ____, quiero que sepa que no me importaba ser padre ahora mismo.

- Solo te quedan 2 meses...- dijo Roxana.

- Eso es muy poco tiempo- dije en un suspiro.

Me levante de la silla de la cafetería, tenía que hacer algo ya.

- ¿Dónde vas?- me pregunto Wendy.

- Tengo que hablar con el directo, necesito saber si me puedo graduar antes.

–Suerte- dijo Roxana.

- La necesitaré...- dije marchándome.

6 angustiosos meses sin ver al amor de mi vida, a la madre de mi niña. Me quede raro cuando me entere de que estaba embarazada, de que yo iba a ser padre, pero no me importo, me importo que ella no me lo dijera y que optara por huir. Pero Roxana o Wendy la llama y ella las llama, luego ellas me cuentan como va, hasta ____ les mando una de las ecografías que se hizo.... ¡Es tan mona mi hija! Mi Stella... Pero esto no me vale, quiero estar con ella, abrazándola, preocupándome con ella, sobando su barriga. Le he comprado cosas, tengo gran parte de mi habitación con ropita rosa de bebé... Un día, Roxana le dijo a __ que tenía algo para ella, entonces ___ le dijo un lugar, no era su casa, Roxana mando el regalo (qué era mio) y ____ lo recogió. Pero por lo menos sé que no se ha ido muy lejos y mis esperanzas de encontrarla, no han disminuido.

Tengo 19años, pasé mi cumpleaños sin ___, un asco la verdad. Hice lo que me pidió, no volví a cerrarme en mi, no, seguí con los estudios, con la música... que por cierto ya hice unas cuantas canciones para mi ____ y mi hija. Cuando encontrara a ____ quería demostrarle que soy maduro, que podre darles una buena vida, que no me da miedo ser padre y que amare a los dos como si no hubiera mañana.

Llegué a la recepción del Director, pregunte a la recepcionista y espere a que el Director me dejara pasar. A los minutos, salió, tenía la mano en la espalda de un chico. Me miro a mí y me hizo un gesto con la mano para que lo siguiera.

- Hombre, señorito Gutierrez ¿Cómo le va?- me pregunto sentándose en su asiento.

- Bien... Los estudios van bien, todos los exámenes aprobados.

- ¿Y por qué esta aquí?

- Me gustaría preguntarle si puedo graduarme antes, no puedo esperar un mes más.

- Pero le faltan los exámenes finales.

- Los hago ahora, no me importa, necesito graduarme lo antes posible.

- Dadme un buen motivo- dijo echándose en el respaldo de su silla

- -Cogí aire- Voy a ser padre y mi comprometida huyo de mi creyendo que yo no estaba preparado... ¿le parece un buen motivo?- dije al borde las lágrimas.

- Hablaré con sus profesores, no le prometo nada- dijo mirándome, serio, como si se compadeciera de mi.

Besos donde no les da la luz *-*

2° Mundos Opuestos (YayoGutierrez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora