2° Mundos Opuestos (YayoGutierrez)

Capitulo 14

Pegue un pequeño chillido y miré delante de mi, allí estaba Yayo, sus hombros se movían por su respiración agitada. Mire al suelo, allí estaba Richard, sentado apoyando las manos en el suelo. Yayo lo había empujado.

- Te vas a arrepentir por esto- me advirtió Richard.

Richard se levanto tambaleando del suelo, nos señalaba a Yayo y a mi.

-- Richard empezó a reír- Os arrepentiréis. Ya te puedes estar despidiendo, ___.

Dio media vuelta y empezó a alejarse a un paso rápido. Quise ir tras él, ya que sabía que iba a hacer, iba a llamar a mis padres. Iba a ir corriendo, pero Yayo me cogió del brazo.

- Suéltame- le dije.

- ¿Qué pasa?

- Va a llamar a mis padres- dije al borde de las lágrimas.

- ¿Qué mierda pasa, ___? ¿Me quieres explicar?- Yayo movió mi cuerpo para captar mi atención.

- No voy aguantar otra despedida

Me zafé de su agarre y empecé a correr hasta la sala de los teléfonos. Estaba lejos, muy lejos. Me faltaba la respiración, pero no me importaba, seguía corriendo. Si nos volvían a separar ya si que no podría seguir con esto. Pude ver al final del pasillo la sala de los teléfonos ¿Y Richard? Empecé a ir más lento, entonces, Richard apareció por una de las entradas del pasillo, me miro y entro corriendo a la sala. Fui tras él, pero tarde.

Richard cogió una lista de números y se metió en una cabina, cerró la puerta, dejándome a mí fuera. Empecé a aporrear la puerta de cristal. Entonces él, sonriendo, se llevo el teléfono a la oreja.

- No, RICHARD, NO- empecé a chillar.

Él solo sonreía, lo que hacía que mis lágrimas bajaran más rápido... Ya todo estaba perdido, de nuevo.

- Richard...- dije intentando controlar mi respiración- Déjame que yo se lo diga.

Pensé que si yo se lo decía, quizás.... Era una estupidez, pero todo había que intentarlo. Escuche como se abría la puerta, entre dentro de la estrecha cabina. Me puse el teléfono en la oreja, justo a tiempo para escuchar el "¿Si?" De mi padre.

- Papa...- susurre.

- ¿____? ¿Hija?- pregunto desesperado...

- ¿Qué pasa?- pregunte.

- Te iba a llamar esta tarde, tengo que hablar contigo...

¿Qué pasaba? ¿Richard ya se lo había contado?

- Dime...

- Tienes que dejar a Richard- me dijo serio.

- ¿Qué? ¿Por qué?- pregunte, extrañada.

- Sus padres nos han estafado, van a ir a la cárcel. Richard seguramente te esté utilizando, no queremos que te haga daño.

- - Sonreí- Oh, vale, ya hablare con él.
- Lo siento cielo, vi lo enamorada que estabas de él... ¿Quieres que te saquemos del internado?

- NO, NO, NO- me apresuré a decir.

- Bueno, si así lo deseas... ¿Qué me querías decir?

- Nada papa- dije sonriendo.

- ¿Segura?

- Si, me tengo que ir a clase... Ya hablamos otro día, manda recuerdos míos a mamá y a mi hermana.

- Adiós.

Entonces colgué el teléfono, giré mi cabeza lentamente, Richard me miraba.

- ¿Pero que haces? Zorra.