Capítulo 11: Secretos y viejos, ¿amigos?

3.9K 1.1K 120
                                    


Secretos y viejos, ¿amigos?

- Bella -

Mi padre llamó a Hold y en minutos ya mi casa estaba llena de policías que tomaban fotos y buscaban evidencias, yo lloraba y mis padres se habían encerrado en la biblioteca con Hold.

- Grecia -

Entré a mi habitación sorprendida por lo sucedido con Perla, tenía mucha curiosidad por saber lo que estaban hablando el policía y los padres de Bella así que decidí hacer lo único que me mantenía entretenida en la casa, quité uno de los cuadros que estaban junto al enorme espejo de mi habitación y vi ese pequeño botón azul, lo presione y el espejo se movió y pude ver la entrada a los pasadizos secretos que tenía la casa y que al parecer nadie más conocía.

Entré y bajé unas escaleras con cuidado para no caer y fui por el angosto pasillo que daba a la biblioteca.

En la pared había un pequeño agujero y por allí podía ver y escuchar todo lo que ellos hablaban.

– Tengo que decirles algo muy importante – les dijo Hold a los padres de Bella.

– ¿Qué cosa? – preguntó Daniella preocupada.

– Decidí volver a investigar lo del corte de los frenos de tu coche – le dijo el policía a Andrew – En los nuevos análisis; los frenos no fueron cortados... se rompieron por causas naturales.

– ¿Causas naturales? – le preguntó él sorprendido – ¿Entonces esto no tiene nada que ver con Thomas Vultu? – le preguntó él.

– No, es imposible que sea él – dijo el policía sacando un papel de su bolsillo.

– ¿Imposible por qué? – le preguntó Daniella.

– Porqué Thomas Vultu murió hace cuatro años – le dijo entregándole el papel.

– ¿Murió? – dijo Andrew – ¿entonces quien quiere hacerle daño a mi hija?

– Eso no lo sabemos, creo que ya es hora de que mis compañeros y yo nos vayamos, ustedes deben descansar; cualquier novedad les avisaré enseguida – dijo Hold levantándose y saliendo por la puerta.

Estaba confundida por lo que acababa de escuchar, ¿Quien era Thomas Vultu y por qué ese nombre me sonaba tan familiar?

Estaba por marcharme cuando oí a Daniella decir:

– Tenemos que irnos Andrew.

– ¿Qué dices mujer? – le contestó – no iremos a ningún lado, yo no dejaré que le hagan daño a mi hija.

– ¡Nuestra hija Andrew! – le gritó ella – Recuerda que yo la tuve nueve meses en mi vientre.

– Sí lo sé, cálmate.

– Ya perdí un hijo Andrew, no perderé otro más, si algo le pasa a Bella, ¡será tu culpa! – dijo ella saliendo de la biblioteca.

¿Otro hijo?, me pregunté a mí misma, mientras me marchaba para ir nuevamente a mi habitación.

( ...Diecinueve años atrás... )

- Daniella -

Desperté en una camilla del hospital y vi al doctor.

– Doctor, ¿cómo está mi hijo? – le pregunté.

– Está muy bien, es un niño sano y fuerte – me dijo él sonriendo.

Entró Andrew a la habitación con nuestro hijo en sus brazos, caminó hacia mí y me lo entregó, lo miré y era el bebé más hermoso que había visto en mi vida.

Estoy Viva © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora