El bajo de "I just called to say I love you" sigue soñando en mi cabeza a 6 horas de haberlo escuchado.
Param pam pam, param pam pam...
Por alguna extraña razón ese sonido me produce paz, me hace sentir segura, tranquila...
Ahí todo me provoca esa sensación.
Ahí soy feliz.
No me importa sentarme en el piso.
No me importa que el polvo lo cubra todo.
No me importa que todo esté en un caos total.
Porque ahí todo está bien.
Yo estoy bien.
Y nadie me lo puede quitar.
La música empieza a sonar.
Me envuelve de pies a cabeza.
Recuero las crisis que había tenido en el día.
Ya nada de eso importa.
Al fin estoy aqui.
Al fin estoy en casa.
Me dicen que lo hice bien, que están orgullosos de mi.
Nunca me lo han dicho se de ESA forma.
Mi sonrisa no es la falsa que llevo durante todo el día.
Es la verdadera.
Soy feliz.
Verdaderamente feliz.
Aunque claro, hay días tristes.
Sólo recuerdo una vez haber llorado ahí.
Fue hace 2 semanas, cuando los vi...
Y ahí fue donde más los necesitaba, a mi familia y nunca me había sentido tan feliz de tenerlos.
"Siempre va a haber un lugar para ti aqui".
"Te queremos".
Gracias a ellos soy lo que soy, y no pueden cambiarlo.
Gracias a ellos aprendí a amar, a reír y que el sol siempre termina saliendo...
En palabras de alguien muy muy especial:
"El amor es preocuparse tanto por una persona que quieras protegerla, que siempre esté feliz y que no sufra".
Creo que aquí encontré el amor.
El amor del bueno.
Mi familia.We found love in a hopeless place...