Viaje al pasado... ¿Será correcto?

Capítulo 4: Primer día de clases

Harry se encaminó hacia su nueva habitación, la que tendría que compartir con los Merodeadores y su padre, por lo que tendría que ser bastante cuidadoso con sus conversaciones con su amigo. Ellos podrían escuchar algo que no debían y todo se iría directamente al basurero sin poder evitarlo, cosa que obviamente no querían. Debían dejar todo como estaba, según Ron, nada debía ser cambiado.

Ron lo seguía pensativo, no podía creer que finalmente habían llegado a ese lugar, a ese tiempo, aun después de haber estado casi un día completo ahí. Se le hacía difícil comprender las ganas que tenía Harry de viajar al pasado sólo para poder vencer a Lord Voldemort "cuando no tenía semejante poder". Él le había dicho que en ese tiempo él era invencible, y estaba seguro que él lo sabía. Según él, Harry había querido ir sólo porque quería probar si resultaba aquel hechizo, una vez abierto el portal, quiso ver si servía o no. Su amigo siempre tenía impulsos.

Impulso. Eso era lo que Harry debía dejar de seguir. Era bastante imprudente el hecho de ir, pero ya estaban ahí, no quedaba más que buscar la forma de poder irse sin haber hecho algún cambio muy brusco, o sea, no haber metido la pata hasta el fondo, pues el arrepentimiento no iba a servir de nada si es que alguien, que originalmente estaba vivo, moría por haber hecho algo indebido. Eso jamás podrían perdonárselos ellos mismos, se odiarían por siempre.

Todo era muy complicado, y tendrían que pensar mucho antes de hacer algo. Ron generalmente no tomaba nada en serio, pero esa vez era completamente diferente, esta vez podría hacer desaparecer a alguien que quería. Esta vez sería serio como si su vida dependiera de ello, porque prácticamente era cierto. Pero había otro pensamiento que le perseguía, uno que no jamás le gustaba admitir, ni a él ni a nadie. Temía. Tenía miedo de arruinar las cosas, pero, por sobretodo, tenía mucho miedo de no volver a ver a su familia, tenía miedo de no volver a su época.

Cuando los dos llegaron a la habitación, vieron que no eran cuatro camas, sino seis. No se veían amontonados, pero supieron que el uso de los dos baños iba a ser bastante complicado por la mañana. Su ropa nueva estaba sobre sus camas, por lo que supieron de inmediato cuáles eran sus camas, por la talla de la ropa que ahí había, además de tener una pequeña nota por parte de su director.

Hermione estaba sentada en su cama, leyendo un tomo de "Del tiempo al tiempo", que era prácticamente el doble de un libro normal, además de viejo y aburrido para cualquier otra personas, pues sólo hablaba de las teorías posibles para solucionar lo que cualquier persona anhelaba: cambiar el pasado por algún error cometido; pero nada servía. No había hechizos que le indicaran cómo regresar a una época original.

—¿Por qué lees eso? —preguntó Lily, acercándose hasta poder leer —. ¿Del tiempo al tiempo? ¡Es un libro excelente! Creo que el sueño de toda persona es poder viajar por el tiempo, y el investigador que creó ese libro no deja todas las esperanzas cerradas… Aunque se conoce un método, ¿lo sabías?

—¿Método? ¿Cuál? —incitó Hermione, bajando el libro, y la observó.

—Giratiempo —sonrió. Hermione desvió la vista, decepcionada —. El Giratiempo es una especie de reloj que tiene…

Hermione dejó de tomarle atención. En su tercer curso había tenido uno de esos, por lo buena alumna que era. Obviamente que conocía para qué servía, sus limitaciones y cómo utilizarlo. No era necesario escuchar lo que la misma profesora McGonagall le había explicado en cuanto se lo explicó. Además, no le servía un Giratiempo para volver al futuro, pues, por lo que ella sabía, sólo servía para "retroceder" en el tiempo, no para viajar al futuro, que era lo que necesitaba hacer, y era de tiempo limitado.

—Desde hace tiempo conoces a…a Harry, ¿no? —habló Lily, mirándole un poco apenada. Hermione le devolvió la mirada —. Digo…le conoces muy bien, ¿cierto?