Apariencias

Capítulo XXV

~Familia

    Hospital St. Joseph, 1:00 a.m., Houston, Texas.

Una hora, una puta hora tenía aquí en la sala de emergencia sin saber nada de Katherine o Chris. Apenas y entramos y nos separaron.

Cuando íbamos por el camino, un coche del lado contrario se salto el camellón y vino directo a estrellarse contra el Mercedes, lo único que logre hacer fue girar el volante y salirme del carril, pero aun así el choche nos alcanzo a pegar en el lado del copiloto. Katherine estaba cubierta en sangre y Chris no reaccionaba.

Andaba de un lado para otro, recorriendo toda la sala, no era el único en la sala y sentía todas las miradas de las personas. La frustración y el enojo recorrían todo mi cuerpo, pase mis manos por mi cara y sentí una pequeña punzada de dolor, tenía la nariz rota por la bolsa de aire. Era lo único que me había hecho en el accidente, nada comparado a lo de ellos.

Es que esta vez iba a ser mi culpa, perdería a mi familia por no estar alerta, es que es lo más seguro. Lo más seguro es que los pierda porque no reaccionaba ninguno de los dos. Los perdería y me quedaría sin familia de nuevo. Le pegue un puñetazo a la pared provocando que me destrozara los nudillos que ahora están cubiertos de sangre. Me deslice por la pared y puse mis codos recargados en mis rodillas, sentí algo recorrer mi mejilla pase mi mano y me di cuenta de que estaba llorando, y que las lagrimas salían sin control. La última vez que había llorado fue cuando me encontraba en el hospital hace siete años y la mitad de mi familia se debatía entre la vida y la muerte. Justo como ahora.

Estos últimos meses he estado con ellos casi todo el tiempo, pasándola bien, viendo películas de ficción porque son con las que más discuten, averiguando si es posible lo que dice la película o no. Saliendo a algún parque de diversiones, yendo a parques o nada más pasando en casa.

Katherine se volvió parte de la familia, pero no solo eso, sino que también ha hecho que vuelva a hablar con Chris y que recuerde que tengo un hermano. No es que lo haya olvidado, simplemente que pasaba de él o él pasaba de mí.

    ̶  Familiares de Christian Lander ̶   la voz de una señora hace que me levante de golpe del suelo.

    ̶  Yo soy su hermano ̶  me acerco a ella.

    ̶  Soy la doctora Wells, y estoy a cargo del él ̶  dice mientras ve los papeles que trae entre sus manos.

    ̶  ¿Cómo esta? ̶  pregunte de forma ansiosa.

    ̶  Su hermano ha recuperado la consciencia ̶   suelto todo el aire que había estado conteniendo hasta ahora. Ella asiente y me hace una seña para que la siga, pasamos por varias camillas hasta llegar a la de Chris.

Parece perdido, viendo para todos los lados y cuando su mirada pasa por donde estoy, su mandíbula se desencaja.

    ̶  ¿Por qué estas todo lleno de sangre? ̶   Mi camisa de seda blanca ya no era nada blanca, ahora estaba cubierta de sangre, pero no era mí, era de Katherine. Trate de moverla cuando estábamos en el coche, para saber si aún respiraba.

    ̶  No es mía.

   ̶  Katherine, ¿En dónde está Katherine?

    ̶  No lo sé ̶   fue un error decirle eso, comenzó a alterarse y a llorar, pero lo peor fue que le dio una crisis de asma.

    ̶   Cálmate Chris, es Kath, no le va a pasar nada, sabes cómo es de terca y no va a dejar que nada le afecte ̶  por más que decía él no se calmaba, así que me acerque y lo abrace. Sus lágrimas corrían sin control por su rostro, y se quedaban en mi camisa.

    ̶  La señorita de la que hablan, ¿es la que llego al mismo tiempo que ustedes? ̶  me retiro un poco de Chris pero no dejo de abrazarlo.

    ̶  Si es ella, Katherine Robinson.

    ̶  Ella ya ha sido trasladada a un cuarto, tenía un par de costillas rotas, una contusión en la cabeza y unas heridas profundas pero nada de lo que deban preocuparse.

    ̶  ¿Podemos verla?

    ̶  No creo que sea una gran idea que el joven Lander también valla.

    ̶  Por favor, necesitamos verla ̶  ella asiente no muy convencida, y nos ensaña el camino.

...

En todo el recorrido Chris no me soltó el brazo, sentía como ejercía presión en el.

Pasamos unos pasillos y unas puertas antes de llegar a la habitación en donde estaba Kath.

Al entrar la vi que estaba descansando en la cama, tenía una venda en la cabeza y varias más en el brazo derecho. Su cara estaba pálida y tenía el cuerpo magullado.

Chris reacciono después de haber estado congelado un rato y corre para ponerse a un costado de la cama y recargar su cabeza en el regazo de ella. Se le escucha sollozar por lo bajo. Katherine se remueve en la cama y lentamente abre los ojos.

    ̶  Hola campeón ̶  su voz es entrecortada y muy baja, pero aún tiene ese tono amable.

    ̶  Creí que nos habías dejado ̶  dice aún sollozando y sin levantar su cara, ella solo pasaba su mano por la espalda de él, para que tratar de que se tranquilizara.

    ̶  Tranquilo campeón, ya pasó, estoy aquí ̶  este la abrazo con fuerza y ella solo hizo una mueca de dolor pero no dijo nada y dejo que la abrazara.

...

Veo como Chris se durmió en el regazo de Katherine y ella también ya se había quedado dormida. Yo solo los veía desde un rincón del cuarto.

El hermano de Katherine ya había venido a verla, sus padres no se encontraban en la ciudad así que él se hizo cargo de todo lo relacionado con el hospital. Victoria también vino a vernos, se hizo cargo del papeleo y nos pidió que volviéramos a casa, pero Chris no se quería alejar del hospital y yo no me quería alejar de ellos así que también me quede. Victoria no tuvo más remedio que irse diciendo que volvería por la mañana.

...

    Casa de los Robinson, 8:00 p.m., Houston, Texas.

Traje a Katherine a su casa, después de cuatro días en el hospital, le dieron el alta pero tomo unos analgésicos para el dolor que le dieron mucho sueño. La baje del Mercedes en brazos para poder llevarla a su cuarto.

Cris no se ha querido separar de ella, muy apenas y come. Yo no quería estar más en el hospital y me pasaba las horas golpeando el costal o teniendo pelas en el gimnasio. Y una que otra vez siendo tentado por el pasado, hasta que una vez cedí ante la tentación.

Pero por las noches siempre me quedaba con ellos porque aun creo que si los dejo de ver los perderé. Casi los pierdo por mi culpa, por ser estúpido y no haber aceptado la sugerencia de Kath de quedarnos en un hotel.

Deje a Katherine en su cama y me recorte junto a ella, le hice una seña a Cris para que también se recostara. Se recostó con cuidado de no lastimarla y entrelazo sus brazos en el de ella, cayendo rendido de estar estos días en el hospital, no había podido descansar bien y ahora se le notaba más relajado.

Me senté en la cama y bese su frente retirando unos mechones rebeldes. También bese la frente de Kath. Me recosté en la cama y pase mi brazo por su vientre para no lastimarla.

Los tres dormimos apretados en su cama, pero fue una de las noches más tranquilas que habíamos tenido en mucho tiempo.

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