La Princesa Híbrida

Capítulo 39 (Editado).

*Adelantaré la historia, hasta los seis meses pasados desde que Juli conoció a Miguel*.

Cada día desde que he llegado, cada día "crezco" un milímetro, así tardaré mucho tiempo en llegar a mi estatura normal. 

Cada tanto, me transformo en lobo en el baño, a escondidas de todos, relajando mi cuerpo. Ya puedo recuperar mi forma normal, pero me estoy esforzando en mantenerme pequeña para poder cumplir mi misión.

De algo que me enteré y me dejó en shock, es que Miguel es el tío de Emi, pero a ellos no les gusta hablar sobre su relación familiar, prefieren que su relación siga siendo la de director~alumno.

Cada domingo, visito a mis verdaderos amigos y cargo la batería de mi celular.

Desde que me convertí en cazadora, estoy durmiendo en una habitación junto a Emi, que está cerca de las habitaciones de las chicas de nuestra categoría de aprendizaje. 

Algo que me da miedo, es saber que soy la criatura más buscada en todo el mundo, ya que soy la híbrida más rara de todas, entonces el que me encuentre, tendrá una gran recompensa. Mi cabeza tiene precio. Lo que más me aterroriza, es saber que los cazadores mataron a mis padres y que estuvieron a punto de matarme a mi, pero no lo lograron y desde entonces, me buscan, pero como me mudaba cada mes, nunca me encontraron y ahora no tienen ni la menor idea de donde estoy. Perdieron mi rastro al mudarme por la vez número ciento noventa y nueve. Los cazadores mataron a cada familiar adoptivo que tenía. Ellos son los culpables de que ahora esté sin padres.

.-.-.

Me desperté, miré la hora. Son las 5:30AM.

Me levanté y fui al baño, para cambiarme. Me puse una remera negra suelta y un pantalón negro oscuro, con unas zapatillas negras deportivas. Me até el pelo, en una "cola de caballo" de costado.

Salí del baño. Emi, está dormida.

Emi me pide siempre que la despierte para los entrenamientos, en caso de que no le suene la alarma, pero como me da lástima despertarla, la voy a dejar durmiendo un rato más, ya que ella necesita dormir muy bien, ya que está en crecimiento y porque cada noche, cada vez está más débil y eso se debe a lo poco que duerme. Cada cierta cantidad de entrenamientos, se desmaya por el sueño y termina en la enfermería.

Al terminar de cambiarme, salí de la habitación en silencio, para no despertar a Emi.

Fui a el gimnasio, para el entrenamiento.

-¿Ya están todos?- preguntó el profesor.

-Si- dijeron todos.

-Solo falta- dijo un chico-, la pequeña, patética y débil- susurró-, Emi- dijo en voz alta.

De lo que dijo, escuché la frase completa y pero el resto solo escuchó "Solo falta Emi".

Tuve ganas de pegarle y dejarlo inconsciente, pero me tuve que resistir.

-Carmen, ¿sabes donde está Emi?- me preguntó el profesor.

-Si- respondí-. Como estaba muy débil, me dio lástima y la dejé dormir un poco más.

-Si, te dará lástima, pero si quiere ser una cazadora de verdad, tendrá que trabajar al mismo ritmo que el resto- dijo el mismo chico que habló hace un rato.

-Emi, no está en las condiciones de seguir este ritmo, ella aún es pequeña- dije.

-Entonces...- preguntó el chico molesto-. ¿Por qué estás tú y ella están con nosotros?

-Yo ya tengo la capacidad física como para hacer eso- respondí sonriendo-. Pero Emi está con nosotros, ya que si yo me convertía en cazadora, ella tendría que venir conmigo.