-¡Juliana!- gritó alguien, despertándome brutalmente y como reacción, le lancé el despertador, ya que es el objeto más cercano a mi-. No seas tan agresiva. Solo soy yo.
Abrí un ojos.
-¿Qué quieres Rafael?- dije, aún dormida.
-Tenemos noticias, sobre la misión "máxima híbrida"- dijo.
-Antes que nada- dije-. ¿Qué hora es?
-Las 2:33AM- dijo, mirando el reloj de su celular.
-¿La noticia no puede esperar? Tengo sueño- me quejé.
-No. Esto es de gran importancia- dijo, mientras me acomodo, para seguir descansando, mientras me habla-. ¿Me estás escuchando?
-Si- respondí-. Sigue hablando, yo te escucho.
-Uno de los cazadores de la ciudad donde vivía la híbrida antes de empezar a desaparecer me dijo que la casa desde hace unos cuantos años está en uso y mandé a algunos cazadores a investigar. Hoy llegaron y me dijeron que la casa, les corresponde a los padres de la híbrida y que esperan mi señal, para matarlos, otra vez- al decir eso, me desperté por completo.
-¡No!- grité.
-Pero les dije que no ataquen, ya que primero quiero que tu vayas con ellos e intentes hablar, para sacarles información, de forma más rápida y eficiente- dijo Rafael.
Suspiré.
-Espera un minuto a que me cambie- dije, yendo hacia el armario.
Agarré una remera blanca con azul, un pantalón negro con rojo y mis zapatillas negras con blanco.
Entré al baño. Me bañé, me cambié, me peiné y salí del baño. Todo eso, en tres minutos.
-Voy a ir a hacerle una visita a alguien especial- dije, agarrando mi mochila y preparando las cosas que voy a necesitar.
-¿Sabes a donde vas a ir? No tienes la...- dijo Rafael, pero lo interrumpí.
-Ya se a donde voy- dije-. Y antes de que preguntes, se que la dirección es correcta, ya que he leído varias veces los archivos de la misión y todos los otros.
-¿Cómo lo haces?- dijo Rafael, una vez más, sorprendido.
-Algún día te darás cuenta- dije.
Salí de allí y fui caminando hasta la entrada del instituto para ir hasta debajo de un árbol y teletransportarme a cinco cuadras de distancia a la casa de mis padres donde, a esta hora, duermen.
Caminé hasta la casa de mis padres.
-Señorita Juliana. ¿Cómo ha logrado llegar?- dijo uno de los cazadores, que duda de mi, igual que el resto.
-Eso no es necesario preguntar- dije-. Ahora, vamos a lo importante.
Un cazador que tenía un celular ne la mano, me llamó a mi.
-El Señor Rafael está en el teléfono- dijo el cazador, poniendo el altavoz.
**En la llamada.*
Rafael: Juliana, entra a la casa y si a los cinco minutos no sales o da una señal de vida, entraremos a la fuerza. Creo que con ese tiempo podrás hablar con el enemigo, antes de matarlo.
Yo: ¿Y si evitamos la masacre y llevo a la pareja fuera de la casa?
Rafael: Es demasiado riesgo para todos los que lo vean y no queremos problemas.
Yo: No me gusta tu plan, pero ok- dije triste.
Rafael: Y al terminar, Juliana, me dirás como logras llegar en menos de quince minutos, cuando mando al grupo especial tardan una hora.
Yo: ¿Por qué todos preguntan lo mismo?
Rafael: Deja de ser tan.. Tú... Y concéntrate en la misión.
Yo: No quiero guerras.
*Fin de la llamada.**
-Ya sabe que hacer, así que prosiga con la fase número dos- dijo un cazador, mirándome mal-. Y no quiero escuchar tus quejas.
-Ok. Ok. Ok. Está bien. No me quejaré- dije-. Pero, ocúltense un rato.
-Está bien- dijo el cazador y se escondió, al igual que el resto.
Cambié de forma mi cara (sin que me vean) y toqué la puerta.
A los tres minutos, mi madre me abrió.
-Hola. ¿Qué necesita?- dijo mi madre, vestida con una bata sobre su pijama.
-Hola señora. Me gustaría hablar con usted, es un tema muy importante y no puede esperar- dije.
-¿Qué sucede?- dijo mi madre.
-Es sobre un asesinato- dije y mi cara volvió a la normalidad-. No digas nada, están los cazadores- susurré.
-Pase, por favor- dijo y entré.
-Hola mami- saludé, en cuanto cerré la puerta.
-¿Quién es?- preguntó mi padre, llegando a nosotras.
Mi padre, al verme, vino a mi y me abrazó.
-Tanto tiempo, mi pequeña- dijo él, abrazándome.
-Tengo malas noticias- dije-. Lo cazadores estás afuera. Vayan a sus mundos, les avisaré a Diana y a Daniel cuando se hayan ido la amenaza y estemos fuera de peligro.
-Ok- dijo mi madre.
-No pienso irme de aquí otra vez- dijo mi padre-. No quiero volver para nunca más regresar.
-Se que no quieres regresar, pero es por tu bien... Me dieron cinco minutos y luego entrarían a la fuerza...- dije-. ¡Tengo una idea! Papá ve a la creepyhouse y vuelves cuando te avise Daniel. Mamá ve a la escuela inhumana y quédate con Diana... Tengo una mejor idea, vayan ambos con Daniel y Diana. Esperen mi señal, y vuelvan.
-Buena idea- dijo mi padre, abriendo un portal-. Hasta pronto mi pequeña- dijo y entró al portal.
-Esperamos tu aviso- dijo mi madre, entrando al portal.
El portal se cerró y los cazadores tocaron el timbre.
Abrí la puerta.
-Ellos no son inhumanos- mentí-. ¡Gracias por su ayuda!- grité y salí de la casa.
-¿No son a quienes buscamos?- dijo un cazador.
-No. Son completamente humanos- dije.
Fuimos a los autos~camionetas de los cazadores y nos subimos.
.-.-.
Al llegar al Instituto hablé con Rafael y luego fui a mi habitación.
Busque ropa limpia y me bañé, preparándome para ir a desayunar y dar las clases que me tocan.
.-.-.
Es la noche, ya todo había terminado, de forma "normal" (si así se le puede llamar a la rutina).
Rafael me informó que la casa, había sido utilizada por humanos normales y no las criaturas que buscan.
Le informé a Diana y a Daniel.
Me preparé para dormir.
Me acosté y en pocos segundos, me dormí.
Editado: 22/11/2019
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La Princesa Híbrida
FantasíaEsta es la historia de una chica llamada Juliana Martinez. Sus padres solo estuvieron con ella el primer mes de su vida y luego la dejaron en un orfanato, ya que ellos murieron. Esta chica tuvo una infancia no muy feliz. Es una niña especial en much...