4.

596 55 12
                                    

Los miré con miedo y escondí mi cabeza entre mis piernas abrazándolas. Corey se acercó más a mi y comenzó a desabrochar su pantalón despacio y con una sonrisa en la cara. Se levantó y se terminó de desabrochar el pantalón.

-No pienso hacerlo-temblando en el suelo-no... no quiero ser tu puta...

-O sea...¿No piensas hacerme una paja?-levantando una ceja.

Negué con la cabeza rápido y se bajó los pantalones. Miré hacia su entrepierna y al ver el bulto que había me sonrojé más que nunca, la verdad es que nunca había visto un paquete tan abultado como ese.

-¿Te gusta?-agarrandoselo-Sid, date la vuelta-mirando a Sid y asta que no se dio la vuelta no me volvió a mirar-no digas que no zorrita, se que te encanta este paquete, y sobre lo de ser mi puta, me encantaría que lo fueras enana...

-N-no me gusta y n-no t-te voy a hacer nada-tragando saliva-no quiero que te aproveches de mi...

Chasqueó su lengua y negó con la cabeza riendo de una manera escalofriante para cualquier persona. Bajó su ropa interior y empecé a temblar más estaba bien dotado, muy bien dotado.

-¿Y una mamada?-preguntó con una sonrisa-cada vez nos vamos acercando más a los niveles finales.

-Que no te voy a hacer nada joder...-con un hilo de voz-Corey, déjame por favor.

-Mmmm...-levantandome con fuerza mientras me cogía de las muñecas-que bien suena mi nombre al salir de tu boca...-cuando ya estuve levantado puso mis muñecas por encina de mi cabeza-suena mejor que cuando lo dice alguna puta gimiendo, como lo hizo tu madre, que bien recuerdo aquel día, cuando ni si quiera sabía que era tu madre... creo que la contrataré algún día de estos de nuevo.

Las piernas me fallaron, quería morirme en esos momentos, quería tirarme desde lo alto de un edificio o ahogarme en un barreño de agua, cualquier método servía, aunque tenía preferencia por los lentos y dolorosos, la cuestión es que lo que hiciera acabara de una vez con mi puta vida, mi puta y asquerosa vida que no servía para nada, y pese a que las piernas me fallaban y no quería estar de pie no me podía caer al suelo porque el agarre del rubio me lo impedía, un agarre que dolía y mucho.

-N-no quiero, d-dejame-comenzando a llorar-por favor... de-dejarme, N-no qui-quiero e-esto.

Negó con la cabeza riendo y me soltó las muñecas y al fin yo caí al suelo como un peso muerto, llorando, con el alma rota, me sentía terriblemente mal y al parecer aquellos dos no se iban a apiadar de mi.

-Se que la ronda tampoco querrás así que lo que quiera hacerte te lo haré en otro momento, y también lo demás-subiendosé el pantalón-esperaré ansioso el día el que pueda hacerlo, porque te deseo, Joey Jordison.

El escuchar mi nombre salir de su boca fue tan excitante... No, no fue excitante, no podía serlo.¿No? Me había hecho pasar el peor momento de mi vida, obviamente no podía ser excitante.

Los miré irse, reían entre ellos sin ningún motivo aparente, bueno, el único motivo aparente era yo
Todos ser reían de mi y me dejaban en ridículo, no podían dejarme en paz, no, tenían que joder más mi asquerosa vida.

Me pasé un rato en el suelo, en posición fetal, pensando o mejor dicho, abrumándome más de lo que estaba, cayendo en mis más oscuros recuerdos.¿Quienes serían mis demonios esta vez? Corey, de ese estaba seguro.¿Sid? No, a ese estilo de gente ya estaba bastante acostumbrado, me dolía lo que me hacían pero ya estaba apunto de terminar de acostumbrarme a ellos.¿Cuál sería el segundo? Siempre que había uno también había otro, más difícil de ver pero que ejercía la misma presión o más sobre mi.

Me levanté del suelo y busque con la mirada la bolsa de la compra. Estaba a un metro de mi y estaba lo que había comprado tirado por el suelo. Lo recogí y fui de nuevo a casa.

Cuando llegué, la más pequeña de mis hermanas me vino a abrazar fuerte y sonreí, era una de las pocas personas que m demostraba que entre todo lo malo había algo bueno, aunque a veces todo lo malo tapaba esa cosita buena.

-¿Qué tal tu día?-me preguntó Anne-¿Ha estado todo bien?

-Sí-mentí, no quería que nadie supiera lo que acababa de pasar-¿Y el tuyo pequeña?

-Bien, la gente es maja, son muy majos conmigo y tenemos muy buenos profesores-respondió-me ha gustado esté primer día de instituto.

-Es verdad, ya has pasado al instituto, ya no eres pequeña-reí-espero que siga siendo así todo el curso.

-¿Por qué iba a cambiar? Mis compañeros son muy majos.

-Va, si son majos y tu eres maja no pasara nada-sonriendo-seguro que le caes muy bien a todos.

-A todos menos a un grupo de chicas, ellas me miran mal, pero los demás me adoran.

-Bueno... es imposible caerle bien a todo el mundo, es muy muy muy difícil.

-Bueno, voy a ir a hacer deberes.

Me dio un beso en la mejilla y se fue corriendo a su cuarto. Sonreí y fui a la cocina para dejar las cosas y despues fui a mi cuarto, donde se encontraba Wed tirado en el suelo leyendo una revista.

-¿Has estado bien sin mi?-le pregunté apoyándome en el marco de la puerta-¿Has tenido la mente despejada?

-He estado preocupado por ti, asta que me puesto a ver...

-¿Porno? Siempre que estás preocupado te pones a ver porno...-reí un poco-por favor...

-Tú también lo harías... pero tienes un móvil muy malo, te debo de comprar uno nuevo-respondió sonriendo y dejando la revista a un lado-tengo suficiente dinero para comprarte uno.

-No hace falta... estoy bien con el que estoy, no puedo mandar mensajes ni nada, solo puedo llamar, pero es lo que tengo y con eso me basta.

-¿Alguien te ha hecho algo al ir sin mi?

-Emm... no-con un risita nerviosa-claro que no.

-----

NA: se que ha sido corto pero bueno... si no me quedaría mal... creo yo

Mis Demonios (Jorey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora